Mi amigo Gary llegó por su solterito de choclo con queso, de entrada, y de fondo un escabeche de pollo con sus aceitunas de botija y su huevo duro, así como una jarrita de chicha morada. “María, se va un año más y recibiremos el 2019 con mucha alegría, pues el optimismo es fundamental. Luego del balance, tenemos que mirar para adelante, proyectarnos y pensar en los principales objetivos que nos tracemos en esta nueva etapa. Desde los más sencillos, como empezar a hacer dieta o tocar algún instrumento musical, hasta aprender un idioma, hacer una tesis universitaria o iniciar un negocio.
El cambio de año es una buena fecha para poner en marcha nuevas metas que nos gustaría alcanzar. Hay que hacerlo con responsabilidad, disciplina y dedicación, pues todo éxito se logra a base de esfuerzo. Este nuevo año tiene que estar lleno de energía positiva para empezar con el pie derecho y no dejar pasar las oportunidades que se nos presenten. Aquí te dejo algunos tips para tus lectores.
- Deja todo lo malo en el año que se va. El 2018 pudo no ser regular y hasta malo, pero es importante dejar atrás todo lo negativo y aprender de ello para que no vuelva a ocurrir.
- Reflexiona sobre aquello que te quieres proponer. Es muy importante tener claro lo que queremos lograr. Los objetivos deben ser posibles y reales.
- No dejes de ser constante. Una de las principales claves del éxito es la perseverancia. Nadie pude lograr lo que desea de la noche a la mañana. Busca las herramientas necesarias y lucha por alcanzar todos tus propósitos.
- Busca siempre una motivación. Se trata del impulso mental que nos da la fuerza necesaria para iniciar la ejecución de una acción. Por ejemplo, si apruebas tus exámenes y terminas la carrera, podrás empezar a trabajar.
- Céntrate en lo que realmente desees o es de tu agrado. No afrontes un propósito porque está de moda, como vestir cierto tipo de ropa o convertirte en un influencer en las redes sociales.
- Programa tu propósito en pasos concretos, con un plazo de cumplimiento. Por ejemplo, si deseas bajar de peso, puedes empezar reduciendo el azúcar y comiendo más ensaladas.
- No tires la toalla. Si algo sale mal, no abandones la batalla. Considéralo un obstáculo previsible, un escollo en el camino y sigue para adelante.
- Despeja tu mente. Olvida lo pasado, sobre todo si es negativo. Detecta tus miedos, enfréntalos y véncelos”. Tiene razón mi amigo Gary. ¡Feliz Año! Me voy contenta, cuídense.