Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un hígado encebollado con arrocito blanco y papa sancochada. Para tomar pidió una jarrita de chicha morada fresquecita. “María, triste el caso del cirujano plástico Carlos Mendo Castillo (38), quien murió de dos balazos disparados por un sicario contratado por su asistente, el venezolano José Espino González, quien asegura era su pareja.
El crimen fue la semana pasada en la autopista Ramiro Prialé, cuando ambos se dirigían a San Mateo. Cámaras de televisión grabaron el instante en que el médico es victimado y el extranjero huye. Luego, este fue capturado y tras ser interrogado confesó que mandó a matarlo por dinero. Por eso es importante conocer a las personas antes de establecer un vínculo. En esta vida tan materialista, donde para muchos lo más importante es el dinero antes que los sentimientos, no se puede ser tan confiado.
Esto va por igual para heterosexuales y homosexuales, hombres y mujeres, jóvenes y viejos. Antes de formalizar una relación debe haber una etapa de descubrimiento y hasta de investigación. Hay que conocer a la persona a quien hacemos entrar a nuestra vida.
Así, debemos conocer a su familia, amigos, saber si trabaja y qué hace por la vida. Estar atentos a su comportamiento. Si es adicto al juego, a las drogas o al alcohol. No se debe caer en el error de dejarse impresionar por algunas atenciones. La gente que busca aprovecharse sabe fingir, se muestran encantadores.
- Que no te mueva el miedo a estar solo o sola. Ten paciencia, ya llegará la persona adecuada.
- Establece expectativas realistas de cómo debe ser tu pareja. Si eres muy exigente, te quedarás solo.
- No te dejes llevar por ideales de historias románticas. La vida es diferente. Hay cosas malas y buenas a la vez.
- Piensa en personas que te complementen y que llenen tus expectativas, que te ayuden a superarte.
- La persona que elijas debe tener valores muy parecidos a los tuyos”. Gary tiene razón. Me voy, cuídense.
MÁS INFORMACIÓN:
