
Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un lomo saltado jugosito con papas doradas, ajicito molido y, para tomar, una jarrita con agua de manzana al tiempo. “María, ayer regresé de comisión a la sede del diario y me di un tiempo para ver al doctor Trome, el médico Alberto Tejada, a través de las redes sociales de Trome, en YouTube y TikTok.
La primera semana tocó el tema del cáncer de piel y ayer fue la sexualidad en los jóvenes. Ese tema me pareció muy interesante, ya que en muchos hogares a los chicos no se les habla abiertamente de sexo, por considerarlo tabú. Pero los tiempos han cambiado, las cifras revelan que muchas niñas salen embarazadas por falta de información y educación.
Esto, reitero, no es promover las relaciones sexuales entre menores, solo darles la información pertinente para evitar que más chicas sufran embarazos no deseados que, casi siempre, truncan sus proyectos de vida. Postas médicas, hospitales y todo centro de salud deberían brindar consejería profesional a los muchachos. Pero la primera responsabilidad es de los padres. Algunos consejos de los expertos para ellos:
- Debe quedarles claro a los hijos que el sexo no es un juego, sino algo maravilloso e importante.
- Los padres y profesores deben adquirir los conocimientos necesarios sobre sexualidad para enseñar a los chicos.
- Debemos repasar nuestro comportamiento sexual para evitar posibles conflictos entre lo que decimos y lo que hacemos.
- Hay que enseñar que toda conducta (sexual o no) que tenga que ver con los genitales debe desarrollarse en la intimidad.
- Debemos enseñarles a conocer y apreciar su cuerpo y ayudarlos a satisfacer la curiosidad que les producen sus cambios físicos.
- Se pueden usar películas, dibujos o el propio cuerpo para explicar. No toda la información debe ser verbal.
- Se debe adecuar la información al nivel de entendimiento del niño o niña, a su ritmo de aprendizaje”.
Gary tiene razón. Me voy, cuídense.
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