Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por su mondonguito a la italiana, sopa de verduras y, para tomar, jugo de maracuyá bien heladito. “María, ya hay fecha para el inicio de la vacunación de los niños de 5 a 11 años. Será desde este lunes 24 de enero. Empiezan los que tienen comorbilidades.
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De esta manera se espera alcanzar la inmunización de más de cuatro millones de menores de esas edades, quienes así estarán aptos para regresar a las clases presenciales en la tercera semana de marzo, como ha anunciado el ministro de Educación, Rosendo Serna. Es una buena noticia. Ante el avance avasallador de la variante ómicron, los padres necesitamos estar seguros de que a nuestros hijos no los va a afectar la pandemia.
Es que en mi barrio casi la mayoría de vecinos se ha contagiado de manera vertiginosa, más que en la primera y segunda olas. Pero hay un elemento tranquilizador en todo esto: nadie se ha puesto grave. Todos tuvieron síntomas leves o como si les hubiera dado una gripe como las de antes, con fiebre, escalofrío y dolor de garganta. Es que tenían sus vacunas completas. De no haber sido así, probablemente habrían estado buscando alguna cama de Cuidados Intensivos o conectados a un balón de oxígeno.
Volviendo al tema de la vacunación de niños, esperamos que sea lo más organizada posible. No me quiero ni imaginar que esos pequeñitos hagan colas por horas y desde la madrugada para que los pinchen. Ellos no pueden aguantar como los adultos, que en algunos casos aguardamos bajo el sol o en pleno frío invernal a que nos vacunen. Por eso pido al Ministerio de Salud que habilite más locales o mayor personal para esa tarea.
A los padres también les pido no maltratar a sus hijos levantándolos de madrugada u obligándolos a que les inoculen. Antes de llevarlos hay que explicarles la importancia de la vacunación y cómo esta salva vidas. Que en realidad el pinchazo dura una milésima de segundo y nada más. Y también que piensen que es un paso para volver a las clases presenciales a estar con sus amiguitos y volver a su vida normal.
En estas últimas semanas, según las autoridades, los casos de contagio en niños subieron ¡cuatro veces! No solo porque la variante ómicron, llegada desde Sudáfrica, es más contagiosa, sino porque los controles se habían relajado o los pequeños de la casa salían a jugar a la calle o los llevábamos de paseo o de compras. Entonces, a prepararse para la jornada de vacunación, que es muy importante”. Gary me quitó las palabras de la boca. Todos debemos llevar a nuestros hijos a la vacunación, no solo por la salud, sino también por el estudio. Me voy, cuídense.