Este Búho ve que el ambiente político y social en el Perú está más movido que nunca. Por eso, hasta duermo con los ojos abiertos, para que nada se me escape. Les presento mis ‘Picotitos’, como les gusta a mis lectores.
MENSAJE PRUDENTE: El presidente PPK se dirigió anoche a la Nación para anunciar que no planteará al Congreso la ‘cuestión de confianza’ por la moción de censura que, con seguridad, recibirá el ministro Jaime Saavedra por parte de la bancada fujimorista. La ‘cuestión de confianza’ era decirles a los parlamentarios: ‘Si sacan a Saavedra, también saquen a todo el Gabinete’. Como el mismo gringo dijo, desistió para evitar más enfrentamientos. Pero al mismo tiempo emplazó al fujimorismo a actuar con seriedad, sin atropellos, es decir, que frenen su ‘mototaxi’. Y le mandó su chiquita a Keiko: ‘Para nosotros, la campaña terminó hace siete meses’.
DESPUÉS DE LA MARCHA: Multitudinaria fue la marcha de los jóvenes la noche del último lunes, en el Centro de Lima, en apoyo al ministro Jaime Saavedra. Pero parece que ni con ese respaldo se salvará de la censura. En todo caso, el costo político de esa decisión -si se concreta- la tendrá que pagar el fujimorismo, pues sus congresistas son los que la promueven, pese a las críticas y sospechas de sus verdaderas intenciones.
EL REEMPLAZANTE: Si se da la censura contra Jaime Saavedra, que PPK no se haga mayores problemas y, en su lugar, nombre a Daniel Mora. Si se trata de defender la Ley Universitaria que muchos legisladores de la mayoría se quieren bajar, nadie mejor que el militar retirado, pues fue él quien la impulsó. En el Perú, muchas universidades ni siquiera cumplen requisitos mínimos de infraestructura para dar clases. A esos centros de estafa varios de nuestros ‘padres de la patria’ defienden tan denodadamente. ¿Para eso fueron elegidos?
LAS CANASTAS: No solo congresistas, sino seguramente también otros privilegiados empleados del Estado cobran doble sueldo en Navidad, reciben costosas canastas y otros regalitos. Estoy seguro que todo eso es legal, pues habrá normas que lo respaldan. Pero qué mal cae en este país donde cientos de miles de profesores, policías, enfermeras y otros trabajadores solo reciben 300 soles de aguinaldo. Esos peruanos se sienten indignados, dolidos con justa razón. Ante la polémica por las canastas para los trabajadores del Legislativo, que cuestan cerca de ¡4 millones de soles!, la bancada de Peruanos Por el Kambio anunció ayer que donarán las suyas al Puericultorio Pérez Araníbar. ¿Y los demás?
LA GENTE SE DESESPERA: Este columnista recorre las calles a diario para sentir el pulso de la gente y nota con preocupación cierta exasperación que aumenta día a día. No es para menos, pues no hay quien pueda mantener la serenidad con las alzas de precios, la inseguridad, las tonterías e injusticias de nuestras autoridades -como las peleítas entre congresistas, o Bruce pidiendo policías para que cuiden su restaurante-, los embotellamientos que aumentan en estas fechas y encima agravados por la pésima costumbre de este gobierno, en las últimas semanas, de cerrar el tránsito vehicular alrededor de Palacio de Gobierno, y el calor que sigue elevándose.
LA MUERTE DE UN ÁNGEL: Es terrible que en este país donde se habla de modernidad y progreso, sigan ocurriendo casos tan bestiales como el de la niñita de once años que fue violada en Chiclayo y sometida a un aborto clandestino en el que perdió la vida. Soy padre de una pequeña y siento que me enfermo ante el calvario, el terror que padeció esta pobre niña sin que nadie, ni una sola persona, le haya tendido una mano. La pequeña perdió a su madre cuando tenía ocho años y pasó a vivir a la casa de sus tíos. Esa fue su desgracia. ¿En qué momento comenzó a ser ultrajada? El primo de 18 años, acusado de haberla violado, fue capturado ayer. Se cree que los padres del sospechoso son los responsables del aborto que la mató. A esa pequeña le falló la sociedad en su conjunto. Le fallamos todos. Su padre, sus demás familiares, sus maestros. Nadie merece terminar así, menos una criaturita como ella. Apago el televisor.