Este Búho ya no tiene ninguna duda de que una banda de aventureros y ‘pirañones’ ha tomado por asalto el Estado. El último escándalo lo viene protagonizando el hasta hace poco ministro de Salud, Jorge López, a quien sacaron del cargo por hacer que trabajadores depositen en la cuenta de la madre de sus hijos cerca de cien mil soles.
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Con ese dinero, más 70 mil dólares que entregó el doctor Quito, el conocido dueño de una red de clínicas, la mujer compró un departamento en Jesús María. Sorprende la celeridad con la que el presidente Pedro Castillo despidió a López apenas salió el reportaje en Latina.
Si para hacer cualquier cambio normalmente se demora semanas. Una explicación podría ser que como pronto llegará a Lima la comisión de la OEA que él ha pedido, quiera pasar como un abanderado de la lucha contra la corrupción, a la que no tolera ni un instante. Muy gracioso.
Pero el dueño de Perú Libre, Vladimir Cerrón, se molestó por el cambio de su ministro. Para nadie es un secreto que el chotano le entregó el Ministerio de Salud para tenerlo contento y asegurarse los votos de su partido.
Mediante un tuit, en el que se le nota que está picón, le reclamó por qué no actuó así de rápido para botar a Bruno Pacheco y Juan Silva.
López es militante del partido del lápiz y antes que a él, Cerrón puso en el cargo a Hernán ‘Agüita arracimada’ Condori. La pregunta ahora es a quién pondrán. Ya hasta miedo da preguntar.
Según la denuncia de ‘Punto final’, el 31 de agosto último seis trabajadores del despacho ministerial de Salud fueron llamados a la oficina del ministro para pedirles que hagan varios depósitos en diferentes agencias del Banco de Crédito en Lima, a una sola cuenta, la de Dervy Apaza Meza, quien fue conviviente de Jorge López.
TRASNACCIONES
Fueron en total doce transacciones que sumaron 98,200 soles. Los trabajadores involucrados, algunos de los cuales tomaron fotos a los vouchers y sobres de dinero pensando que estaban ante un hecho ilícito, han señalado como instigadores a Juan Carlos Delgado Echevarría, jefe del gabinete de asesores, y a Dayse Gamarra Vera, asistente del ministro.
En cuanto al médico Luis Quito, este depositó los 70 mil dólares también en la cuenta de Dervy Apaza el 23 de setiembre. El ahora exministro se defiende diciendo que en realidad encargó a una persona de su confianza para hacer el depósito de los 98 mil soles, pues no tenía tiempo para hacerlo él por su recargada agenda de trabajo.
Sobre los 70 mil dólares, asegura que fue por la venta de un tomógrafo de su propiedad a Quito. En las últimas horas circuló un contrato de compra venta simple entre López y Quito. El documento no está notariado. Ante las sospechas de ‘pitufeo’, el fiscal Jorge García, del Segundo Despacho del Equipo Especial contra la Corrupción del Poder, anunció el inicio de una investigación preliminar contra el exministro.
Ayer realizó diligencias en el Ministerio de Salud y en la clínica del doctor Quito. La hipótesis que se maneja es de ‘lavado de activos’. Lo más triste es que la salud en el país está por los suelos. No se construyen más hospitales, los que hay no tienen las máquinas ni implementos necesarios y quienes más sufren son los pobres, esos mismos por los que iba a trabajar Pedro Castillo.
“No más pobres en un país rico”, repitió hasta el cansancio en campaña. Mejor hubiera dicho “no más familiares míos pobres en un país rico”, porque estos son los únicos que se están beneficiando junto a sus paisanos chotanos.
Ayer el cardenal Pedro Barreto le exhortó a Castillo que renuncie. “El gran favor que podría hacer es ponerse a un costado”, le dijo en una entrevista. Sería lo mejor para el país. Apago el televisor.
