Este Búho recordó ayer una parte de la película ‘Caracortada’ (1983) donde el mafioso se niega a matar niños y firma su sentencia de muerte ante un capo boliviano. Esas lacras que acribillaron a toda una familia en San Miguel no tienen perdón. Al Pacino fue quien encarnó magistralmente a Antonio ‘Tony’ Montana, un delincuente y homicida cubano que escapa del régimen de la isla junto a miles de sus compatriotas en balsas y barcos del puerto de Mariel.
MIRA: Crimen sin perdón
En Miami es recluido junto a su amigo Manny Rivera (Steven Bauer) en una cárcel provisional. Tony quiere volverse rico en América, pero teme que por sus antecedentes lo devuelvan a la isla. Para su ‘buena suerte’, Manny le comunica que un ricachón de Miami quiere que haga un trabajito: Va a llegar como refugiado un exjerarca del régimen comunista que se peleó con Castro y lo ha deportado, y debe asesinar a Emilio Rebenga, quien mató al hermano de ese ricachón en la isla. Tony le responde: ‘Si tengo que matar a un comunista, lo hago hasta gratis’.
Durante un motín en el campo de refugiados, Montana asesina a cuchillazos a Rebenga y él y su grupo obtienen la ansiada tarjeta de residencia. Así inicia un ascenso en el próspero negocio del narcotráfico en Miami. Trabaja al servicio del capo de la ciudad Frank López (Robert Loggia, en gran papel), quien tiene como esposa a Elvira Hancock (enigmática y muy deseable Michelle Pfeiffer). La lealtad, la traición y la ambición envuelven a un personaje violento, que vive el conflicto de ser despreciado por su madre, quien lo considera ‘una vergüenza’ para los cubanos honestos de Miami y rechaza su dinero sucio, mientras se deslumbra y cela a su bella hermana Gina (inolvidable Mary Elizabeth Mastrantonio).
Tony encara a su jefe Frank, quien intentó matarlo. ‘¡Tú no tienes huevos, Frank!’, le grita mientras su exjefe implora por su vida: ‘Tony, no me mates. Tengo diez millones en España, son tuyos. Elvira… quédate con mi esposa. Yo desapareceré’, ruega, llora Frank, mientras Tony le ordena a Manny: ‘Mata a esta cucaracha’. Con ello, Tony logra llegar a la cima. Pocos saben que De Palma y el guionista Oliver Stone, antes de ‘Pelotón’ (1986), se bronquearon durante el filme.
De Palma exigía ampulosidad, escenas delirantes
Mientras que Oliver se cuidaba de retratar los conflictos sociopolíticos con sumo cuidado. La crítica seudoizquierdista y los cubanos anticastristas demolieron el filme, pese a que fue un éxito de taquilla. Montana era un asesino, pero se negó a matar niños y la mafia boliviana lo condenó a muerte en un combate épico entre el mafioso y decenas de sicarios. De Palma fue un visionario. Años antes de la aparición de Pablo Escobar, ya Tony Montana tenía una mansión con un zoológico adentro, con tigres, cocodrilos y elefantes.
La escena donde Montana hunde su nariz en un cerro de cocaína pasó a ser una de las diez más recordadas sobre gángsters. Se criticó la excesiva dosis de violencia de la cinta, pero unos años después Quentin Tarantino utilizaría mucha más sangre en ‘Reservoir dogs’ y ‘Pulp fiction’ y ganó el Festival de Cannes. Han pasado algunas décadas y hoy ‘Caracortada’ es un filme de culto. Memorable es la escena donde Tony está con los ojos desorbitados, en el balcón de su casa, con una ametralladora en mano, recibiendo decenas de balas y gritándoles a los sicarios ‘Say hello to my little friend’ (’Saluden a mi amiguito, ja, ja, ja), mientras que en un globo aerostático anclado en la mansión se leía ‘el mundo es tuyo’. ‘Caracortada’, un clásico que se adelantó a la época. Apago el televisor.