Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un lomito al jugo con arroz blanco graneadito, perejil picado, rocoto y un refresco de fresa. “María, el 2016 comenzó con una serie de sorprendentes desastres climáticos en gran parte del mundo, que los científicos habían advertido que podrían ocurrir por el fenómeno de ‘El Niño’ y el calentamiento global, este último consecuencia de la terrible contaminación provocada por el hombre. El 25 de diciembre, más de 200 vuelos fueron cancelados en el aeropuerto internacional de Pekín por las nubes tóxicas en la capital china.
La concentración en el aire de smog multiplicaba por 20 los límites señalados por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Flotaban en el ambiente densas nubes de las partículas sólidas capaces de llegar hasta lo profundo de los pulmones y causar enfermedades crónicas. Y en Nueva Delhi, la capital de la India, la densidad del smog lobliga a adoptar medidas radicales para que millones de automóviles dejen de circular. Estos son solo dos ejemplos del desastre que el hombre está causando en el planeta. Aparte, los bosques, que son el pulmón del mundo, están desapareciendo por la tala de árboles.
El agua dulce es cada vez más contaminada y ya escasea. La quema de combustibles fósiles (sobre todo por los millones de vehículos e industrias de potencias como China y Estados Unidos), es la principal causa del temido calentamiento global, con lo que ya no existen ciudades con aire puro. Son consecuencias del fenómeno de El Niño (que este año está acentuado por el cambio climático), las gigantescas inundaciones en Estados Unidos (Missouri, Illinois, Oklahoma y Arkansas) que han matado a unas 30 personas y amenazan a otros ocho millones. Lo mismo ocurre en Inglaterra, el norte de Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, donde cientos de miles de personas fueron desplazadas. Además, las temperaturas están anormalmente más cálidas en el noreste de Canadá y en Australia.
La NASA señala que El Niño provocará este año frío en el sur de Estados Unidos y un inusual calor en el norte, lo que se sumará a la serie de tornados que azotan a ese país donde han matado al menos a 43 personas. En Perú, cinco provincias de Loreto han sido declaradas en emergencia por las lluvias e inundaciones, y en diciembre hubo en San Martín más de 14 mil afectados por el desborde de ríos, mientras se espera una dura sequía en el sur del país. El clima está enloquecido, y es en gran parte culpa del hombre”. Gary tiene razón. Me voy, cuídense.
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Mi amigo, el fotógrafo Gary, llegó al restaurante por un lomito al jugo con arroz blanco graneadito, perejil picado, rocoto y un refresco de fresa. “María, el 2016 comenzó con una serie de sorprendentes desastres climáticos en gran parte del mundo, que los científicos habían advertido que podrían ocurrir por el fenómeno de ‘El Niño’ y el calentamiento global, este último consecuencia de la terrible contaminación provocada por el hombre. El 25 de diciembre, más de 200 vuelos fueron cancelados en el aeropuerto internacional de Pekín por las nubes tóxicas en la capital china.
La concentración en el aire de smog multiplicaba por 20 los límites señalados por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Flotaban en el ambiente densas nubes de las partículas sólidas capaces de llegar hasta lo profundo de los pulmones y causar enfermedades crónicas. Y en Nueva Delhi, la capital de la India, la densidad del smog lobliga a adoptar medidas radicales para que millones de automóviles dejen de circular. Estos son solo dos ejemplos del desastre que el hombre está causando en el planeta. Aparte, los bosques, que son el pulmón del mundo, están desapareciendo por la tala de árboles.
El agua dulce es cada vez más contaminada y ya escasea. La quema de combustibles fósiles (sobre todo por los millones de vehículos e industrias de potencias como China y Estados Unidos), es la principal causa del temido calentamiento global, con lo que ya no existen ciudades con aire puro. Son consecuencias del fenómeno de El Niño (que este año está acentuado por el cambio climático), las gigantescas inundaciones en Estados Unidos (Missouri, Illinois, Oklahoma y Arkansas) que han matado a unas 30 personas y amenazan a otros ocho millones. Lo mismo ocurre en Inglaterra, el norte de Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, donde cientos de miles de personas fueron desplazadas. Además, las temperaturas están anormalmente más cálidas en el noreste de Canadá y en Australia.
La NASA señala que El Niño provocará este año frío en el sur de Estados Unidos y un inusual calor en el norte, lo que se sumará a la serie de tornados que azotan a ese país donde han matado al menos a 43 personas. En Perú, cinco provincias de Loreto han sido declaradas en emergencia por las lluvias e inundaciones, y en diciembre hubo en San Martín más de 14 mil afectados por el desborde de ríos, mientras se espera una dura sequía en el sur del país. El clima está enloquecido, y es en gran parte culpa del hombre”. Gary tiene razón. Me voy, cuídense.
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