Fue una grata sorpresa para muchos ver al rey Carlos III acercarse a saludar la los cientos de admiradores que esperaban su llegada desde Escocia a las puertas del palacio londinense de Buckingham, pero más sorprendente aún fue el beso que recibió de una seguidora.
Una mujer que esperaba, como tantas otras personas, junto a las vallas de Buckingham Palace decidió darle un beso a Carlos III tan pronto como lo tuvo en frente y el rey, quizá algo sorprendido por el atrevido gesto, lo recibió. Toda la escena fue captada por la televisión británica.
Más tarde se identificó que la mujer del beso es Jenny Assiminios que, debido a su famoso momento, fue entrevistada por la cadena CNN.
“No podía creerlo y le dije, ‘¿puedo darte un beso?’ Y él dijo: ‘Bueno, sí’. Así que lo agarré y estoy muy feliz”, dijo la mujer a la cadena internacional y agregó que vio al rey triste.
Vestido de traje oscuro, el primogénito de Isabel II y el príncipe Felipe intercambió palabras con la multitud, que le sonreía con afecto y en algún momento entonó los primeros versos del himno nacional, que ha cambiado el vocablo reina por el de rey al implorar “God Save The King”.
El rey, de 73 años, pasó un largo rato recorriendo las filas de simpatizantes situados detrás de las vallas, protegido de cerca por su equipo de seguridad.
Después repasó con Camila, la reina consorte, las flores depositadas en honor de su madre, fallecida el jueves a los 96 años en el castillo escocés de Balmoral.
Con esta actitud cercana, Carlos III, que como heredero defendió múltiples causas e intervino en la vida pública, parece indicar que mantendrá su contacto con la ciudadanía, en contraste con el estilo más distante de Isabel II.
Con información de EFE