¡Todo exceso es malo! Un niño de 12 años, adicto a los videojuegos, sobre todo al Fortnite, convulsionó tras pasar varias horas jugando. El menor tuvo que ser internado en un hospital de Reino Unido al caer desmayado en su cama: médicos le detectaron fatiga crónica. Vicky Winstanley, madre del menor explicó que desde diciembre los cambios en la conducta en su hijo se hicieron más evidentes porque pasaba mucho tiempo frente a su televisor jugando Fortnite, un videojuego de moda. “Nathan no estaba muy bien. Él estaba constantemente cansado, estaba fatigado”.
Incluso, agregó que en muchas ocasiones al menor le costaba mantenerse despierto y que tenía problemas con recordar cosas que habían sucedido en un corto plazo de tiempo. Pero todo empeoró cuando el niño pasó casi toda la noche jugando Fortnite y a la mañana siguiente la mamá encontró a su hijo inconsciente sobre la cama. “Él estaba sobre la cama, al lado estaba el control, el televisor estaba encendido, el juego aún funcionaba, pero parecía que había sufrido algún ataque o convulsión. Se había desmayado por completo y no podía despertarlo”.
El médico le diagnosticó fatiga crónica y recomendó llevar terapia contra la adicción a los videojuegos.
Fortnite, que se lanzó en 2017, tiene 250 millones de jugadores registrados, incluidas las estrellas del fútbol de Inglaterra Harry Kane y Dele Alli. Es gratuito, pero ofrece extras pagados lo que le permite ganar aproximadamente dos mil millones de dólares para su desarrollador estadounidense Epic Games el año pasado. Aunque está destinado a jugadores mayores de 12 años, muchos niños pequeños se han vuelto adictos. La popular versión de Battle Royale de Fortnite ve a 100 jugadores enfrentados entre sí, creando avatares de superhéroes para una lucha a muerte con ballestas, rifles e incluso lanzagranadas.