Es común que muchas personas decidan iniciar su paso por el mundo laboral al mismo tiempo que llevan una carrera universitaria o técnica. Aunque puede parecer un reto para muchos, puede ser una etapa enriquecedora para aquellos que pueden organizarse y llevar una vida ordenada.
Esta rutina diaria se puede convertir en una pesadilla y llenarte de estrés si no logras llevar un buen orden para avanzar en este mundo de oportunidades, así que Bumeran.com te da cinco consejos para lograr tener el control de tu vida y no dañes tu salud.
1. Prioriza tus actividades
Es clave que tengas en claro cuáles son tus actividades prioritarias para así ponerles más atención y cumplir de forma segura con esa entrega o actividad que debes llevar a cabo. Organiza una lista con un rango de mayor a menor importancia de las tareas, esto te permitirá tener cubiertas las obligaciones primordiales y que puedas encargarte del resto de forma paulatina.
2. Usa un calendario o una agenda
Estas herramientas son infalibles para tener claro qué actividades, reuniones, exámenes o entregas debes cumplir cada día y durante toda la semana. Calendarizar las actividades es muy importante para poder aprovechar al máximo el tiempo, especialmente cuando no cuentas con mucho. Los calendarios online, como Google Calendar o el calendario de iCloud, son perfectos para el seguimiento de tus pendientes. Ambos te permiten programar alarmas o recordatorios que avisan cuando hay una fecha de entrega, reunión o prueba importante.
3. Concéntrate en el estudio o en el trabajo de forma separada
No es novedad que el multitasking empeora considerablemente el rendimiento de las personas. El cerebro, en lugar de hacer diferentes tareas a la vez, sólo cambia entre unas y otras, y, muchas veces, tarda más tiempo en realizarlas. Por lo tanto, es preferible que separes las cuestiones laborales de las estudiantiles. De esta forma, podrás ser más efectivo y realizar mejor las tareas.
4. Aprovecha las clases al máximo
Es importante que te guíes por las clases, absuelvas todas tus dudas acerca de una materia y realices buenos resúmenes de las clases. De este modo, evitarás repasos excesivos sobre un tema. Al hacer un trabajo o rendir una prueba, los apuntes serán tu guía de aquello que se resaltó en clase y, por lo tanto, de lo que hay que priorizar durante tus sesiones de estudio.
5. No te exijas demasiado
Equilibrar la vida laboral con los estudios puede ser difícil, pero estresarse y sumar presión a la situación solo puede empeorar el panorama. No siempre contarás con el tiempo para realizar todas tus tareas. Así que si no cumples con alguna de ellas el día que se tenías pensado, no debes sentirte culpable. Para aprovechar lo mejor de esta experiencia, es ideal que seas consciente de la dificultad que implica trabajar y ser estudiante al mismo tiempo.