El tabaco, consumido principalmente a través del hábito de fumar, es reconocido mundialmente como uno de los mayores peligros para la salud pública. Este producto, repleto de sustancias tóxicas, tiene un impacto negativo en prácticamente todos los órganos de nuestro cuerpo. A continuación, detallaremos cinco formas importantes en las que el tabaco puede afectar la salud.
El doctor Sebastián Arrieta, experto en Medicina de la Obesidad nos explica todo lo que causa el tabaco en nuestro organismo para prevenir diversas enfermedades.
ENFERMEDADES CARDIOVASCULARES
El tabaco es uno de los principales causantes de enfermedades cardiovasculares, incluyendo ataques cardíacos y derrames cerebrales. La nicotina presente en el tabaco hace que los vasos sanguíneos se estrechen, dificultando el flujo de sangre y aumentando la presión arterial. Con el tiempo, este estrés constante en el sistema cardiovascular puede llevar a enfermedades graves.
ENFERMEDAD PULMONAR OBSTRUCTIVA CRÓNICA
El tabaco es la causa principal de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), una enfermedad que causa dificultad para respirar y que a menudo lleva a una discapacidad a largo plazo. El humo del cigarrillo daña los pulmones y causa inflamación, lo que lleva a un progresivo deterioro de la función pulmonar.
CÁNCERES
El consumo de tabaco también puede provocar varios tipos de cáncer, siendo el más conocido el cáncer de pulmón. Sin embargo, también está asociado con cánceres de boca, garganta, esófago, estómago, hígado, páncreas, riñón, vejiga, cuello uterino, colon y recto, entre otros. Las sustancias químicas cancerígenas en el tabaco dañan el ADN de las células, lo que puede llevar a mutaciones y al crecimiento descontrolado de células cancerosas.
SALUD ORAL
Fumar tabaco puede tener graves consecuencias en la salud oral, causando mal aliento, decoloración dental, pérdida de dientes, y enfermedad de las encías. También aumenta el riesgo de desarrollar cáncer oral.
SALUD ÓSEA
Finalmente, el tabaco afecta negativamente la salud ósea. Fumar puede interferir con el equilibrio del calcio en el cuerpo, aumentando el riesgo de osteoporosis, una afección que debilita los huesos y los hace más propensos a fracturarse.
El consumo de tabaco tiene un impacto profundamente negativo en nuestra salud, desde nuestros corazones hasta nuestros huesos. La mejor manera de protegerse contra estas amenazas es nunca comenzar a fumar o, si ya eres fumador, buscar ayuda para dejar de fumar. Aunque puede ser un desafío, los beneficios para la salud de dejar de fumar son inmediatos y aumentan con el tiempo. Nunca es tarde para dejar de fumar y comenzar a vivir una vida más saludable.
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