El celular es muy útil, pero también puede causar daños. Si es usado en exceso, crea dependencia y es capaz de afectar la comunicación hasta llegar al punto de destruir las relaciones con los amigos, familia y la pareja.
“Estos equipos generan una falsa sensación de estar acompañado y hace que no nos sintamos rechazados, por eso muchos se ‘enganchan’ y se genera un aumento de un neurotransmisor llamado dopamina, que crea el síndrome de abstinencia o dependencia”, afirmó a Trome el doctor Carlos Vera, médico psiquiatra de EsSalud.
Agregó que muchas personas, al ‘chatear’ en las redes sociales, ‘pierden el contacto físico y se alejan cada vez más de los que están a su lado’.
En los niños, si su uso no es controlado, puede provocar aislamiento (evitan salir a jugar a la calle), dificultades para socializar con otros pequeños, poco interés por estudiar, depresión y menor retención de información.
CONSEJOS
- Limite el uso de las redes sociales en una o dos horas al día.
- Establezca un horario de reunión con todos los integrantes de la familia para conversar, compartir experiencias.
- Evite revisar el celular de noche, pues impide conciliar el sueño.
- Fomente en sus hijos actividades al aire libre. Sáquelos a pasear, jugar.