Embarazo después de los 40 años, ¿qué tan complicado es?

La edad importa, pero también el estado de salud antes de la gestación. Deja de pensar en las complicaciones y enfócate en estar lo más relajada posible. Si eres rigurosa y ordenada con tus chequeos, todo irá bien.

Estefany Valladares

Actualizado el 11/05/2023, 03:02 p.m.

Si bien todos los embarazos pueden complicarse, a partir de los 40 años el riesgo aumenta aún más. Ya sea por abortos espontáneos, muy frecuentes en el primer trimestre, o desarrollo de diabetes gestacional. Sin embargo, lo más importante en esta etapa es alejar todo el estrés posible y vivirla a plenitud.

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La ginecóloga Cynthia Serpa afirma que la clave para llevar un embarazo saludable a esa edad es tener un control prenatal óptimo y muy riguroso. “Es verdad que una gestación después de los 40 puede traer complicaciones como abortos espontáneos, diabetes gestacional, preeclampsia, hipertensión o parto prematuro, pero además de la edad, influye muchísimo la salud de la mujer antes de salir embarazada”, comenta la doctora.

Supo brinda estos tips para llevar un embarazo tranquilo a los 40:

Deja de pensar en riesgos y complicaciones que hay a tu edad, enfócate en tu bebé y en mantenerte lo más relajada posible.
Sé muy organizada y comprometida con los controles médicos.
Haz ejercicios (moderados y aprobados por tu médico) y lleva una alimentación saludable.
Resuelve todas tus dudas e inquietudes con el ginecólogo. Si no es suficiente, busca segundas opiniones.

DATITO A TENER EN CUENTA

Finalizando los 30 años, la calidad y cantidad de los óvulos disminuyen. Este factor aumenta el riesgo de alteraciones cromosómicas en el embarazo, como síndrome de Down.

¿Mamá primeriza? Consejos para cuidar tu bienestar físico y emocional

Es entendible que con la llegada de los hijos algunas situaciones personales pasen a segundo plano. Sin embargo, aun cuando tus prioridades cambian, jamás debes descuidar tu salud física ni emocional.

Organiza tus quehaceres y date un tiempito para tu vida personal, descansar e ir al médico. Fotos: Istock.

Haz un huequito en tu agenda y dedica un par de días a realizarte todos los controles necesarios según tu edad. No dejes que la rutina, el trabajo y los deberes con los hijos afecten tu bienestar. Después de todo, si uno no se cuida, ¿quién lo hará?

Por ello, la doctora Cecilia Solís-Rosas García, miembro del Consejo Consultor de Nutrición de Herbalife, comparte unos consejos prácticos para cuidarse ni bien llega la maternidad:

Mucho ojo con tu alimentación. Consume frutas, verduras, cereales integrales y legumbres, alimentos ricos en fibra, carne de pollo, pescados grasos y frutos secos. Reduce la ingesta de frituras, productos con azúcares refinados o altos en sal.
Hidrátate muy bien. Por lo menos 2 litros de agua al día (agua pura sin azúcar ni frutas).
Haz la actividad física que disfrutes. No es necesario ir al gimnasio. Puedes caminar, bailar, nadar, jugar con tus hijos, caminar con la familia. También es importante mantener un hobby para reducir el estrés.
Separa un tiempo de la semana para ti. Aprovecha en relajarte y recargar energías.
Duerme lo más que puedas. Si no puedes conciliar el sueño, realiza ejercicios de respiración que te relajarán y así dormirás plácidamente.
Anda a tus chequeos médicos. No esperes que te duela algo para ir. Recuerda que es mejor prevenir que lamentar.