Cuando tu perro te lame las manos o la cara, tu amigo de cuatro patas expresa cariño, felicidad, sumisión o tal vez confirma quién eres y se identifica contigo.
MIRA: ¿Cómo saber si mi perro está sufriendo un golpe de calor?
El lamido viene con el nacimiento, cuando la mamá lame a sus cachorros para identificarlos como suyos e incentivar su circulación sanguínea.
Si los perritos lamen la cara de su madre normalmente es porque quieren comer. Cuando los cachorros son más grandes, el lamido pasa a ser un saludo y una forma de estrechar los vínculos de la manada (que es como el perro ve a la familia con la que vive).
También regalan lametones como una señal de calma y sumisión. Es un comportamiento subordinado importante para mantener la armonía en el grupo.
Lo mencionado, según la etología (que estudia el comportamiento de los animales), explica la conducta de nuestra mascota cuando nos lame las manos o la cara, a nosotros que somos sus proveedores de cariño y comida, tal como lo hacía con su mamá.
Por eso, al lamernos, nuestros engreídos nos saludan, están felices por tenernos al lado y a veces piden cariño y alimento. Lamer es una manera de saludarnos, de decirnos que están contentos porque regresamos, y de fortalecer la relación con nosotros.
Sabías que...
Algunos perros muerden a un integrante de la casa (no como un ataque) y luego lo lamen. Eso no indica que el can pide ‘perdón’, sino que fortifica un vínculo de dominio sobre esa persona de la ‘manada’ familiar.
TE PUEDE INTERESAR:
- ¿Por qué los perros se echan donde cae el sol?
- ¿Por qué mi perro no quiere comer?
- Aprende a identificar los diferentes ladridos de tu mascota