Esta delicia natural está disponible durante todo el año, pero es en verano donde debes consumirla más porque hidrata y ayuda a la disolución de colesterol en el organismo gracias a uno de sus componentes: la pectina. Y por si fuese poco, aporta vitaminas y minerales.
1. Buena para el corazón. Por la presencia de pectina, la manzana evita que el colesterol se acumule en las paredes internas de los vasos sanguíneos, lo cual disminuye las probabilidades de padecer enfermedades cardiacas.
2. Combate el tránsito intestinal lento. En la cáscara de esta fruta se concentra una cantidad importante de fibra insoluble que ayuda a la evacuación intestinal.
3. Fortalece la memoria. La quercetina es un poderoso antioxidante que también se encuentra en las manzanas, y está demostrado que mejora la memoria y activa las funciones cerebrales.
4. Hidrata. Alrededor del 80% de su composición es agua por lo que calma la sed en época de calor. A la vez, es depurativa y diurética. Altamente recomendable para personas que sufren de retención de líquidos.
5. Mantiene los dientes sanos. Cuando se mastica una manzana se estimula la producción de saliva en la boca. Esto ayuda a reducir de forma considerable las bacterias que causan la caries y otros tipos de infecciones bucales.
6. Evita el envejecimiento celular. Posee un antioxidante llamado catequina que actúa contra los radicales libres causantes del envejecimiento celular. Esto convierte a la manzana en beneficioso para el rejuvenecimiento. Además, se está estudiando sus propiedades anticancerígenas.
Esta delicia natural está disponible durante todo el año, pero es en verano donde debes consumirla más porque hidrata y ayuda a la disolución de colesterol en el organismo gracias a uno de sus componentes: la pectina. Y por si fuese poco, aporta vitaminas y minerales.
1. Buena para el corazón. Por la presencia de pectina, la manzana evita que el colesterol se acumule en las paredes internas de los vasos sanguíneos, lo cual disminuye las probabilidades de padecer enfermedades cardiacas.
2. Combate el tránsito intestinal lento. En la cáscara de esta fruta se concentra una cantidad importante de fibra insoluble que ayuda a la evacuación intestinal.
3. Fortalece la memoria. La quercetina es un poderoso antioxidante que también se encuentra en las manzanas, y está demostrado que mejora la memoria y activa las funciones cerebrales.
4. Hidrata. Alrededor del 80% de su composición es agua por lo que calma la sed en época de calor. A la vez, es depurativa y diurética. Altamente recomendable para personas que sufren de retención de líquidos.
5. Mantiene los dientes sanos. Cuando se mastica una manzana se estimula la producción de saliva en la boca. Esto ayuda a reducir de forma considerable las bacterias que causan la caries y otros tipos de infecciones bucales.
6. Evita el envejecimiento celular. Posee un antioxidante llamado catequina que actúa contra los radicales libres causantes del envejecimiento celular. Esto convierte a la manzana en beneficioso para el rejuvenecimiento. Además, se está estudiando sus propiedades anticancerígenas.