‘Pirata’, un perro blanco y negro, aguarda a su dueño muerto hace tres meses en un hospital de la provincia de Córdoba (centro), en , y se niega a moverse de allí, a pesar de los intentos del personal del establecimiento.

El animal ingresó al Hospital San Antonio de Padua de la ciudad de Río Cuarto con su amo antes de que este fuera operado sin éxito. Cuando su dueño murió, ‘Pirata’ permaneció allí y, desde entonces, espera que el hombre vuelva a aparecer por los pasillos del hospital.

El perrito merodea las inmediaciones de la habitación 404, donde operaron a su amo, e incluso intenta entrar a buscarlo allí, informó la agencia EFE.El personal del hospital intentó varias veces retirar a Pirata de las instalaciones, pero él vuelve al lugar.

Esta no es la primera vez que una historia así sucede en Argentina: ‘Capitán’ fue otro can que se hizo famoso por vivir más de ocho años arriba de la tumba de su dueño en el cementerio de Carlos Paz, también en la provincia de Córdoba.

‘Pirata’, un perro blanco y negro, aguarda a su dueño muerto hace tres meses en un hospital de la provincia de Córdoba (centro), en , y se niega a moverse de allí, a pesar de los intentos del personal del establecimiento.

El animal ingresó al Hospital San Antonio de Padua de la ciudad de Río Cuarto con su amo antes de que este fuera operado sin éxito. Cuando su dueño murió, ‘Pirata’ permaneció allí y, desde entonces, espera que el hombre vuelva a aparecer por los pasillos del hospital.

El perrito merodea las inmediaciones de la habitación 404, donde operaron a su amo, e incluso intenta entrar a buscarlo allí, informó la agencia EFE.El personal del hospital intentó varias veces retirar a Pirata de las instalaciones, pero él vuelve al lugar.

Esta no es la primera vez que una historia así sucede en Argentina: ‘Capitán’ fue otro can que se hizo famoso por vivir más de ocho años arriba de la tumba de su dueño en el cementerio de Carlos Paz, también en la provincia de Córdoba.

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