Hace unos días, leí un post en una red social, donde una persona de 45 años contaba que había perdido el trabajo y llevaba a tres meses postulando a diferentes empresas sin tener suerte. Esta situación lo tiene estresado, ya que tiene que cubrir los gastos escolares y cumplir con las otras responsabilidades del hogar. La ansiedad le ha generado insomnio, falta de apetito, angustia, entre otros malestares.¿Y cómo puede hacer para enfrentar este momento tan incierto?
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La psicóloga Massiel Martel de la Ong Siembra nos responde algunas dudas y nos da una orientación para manejar este caso.
Me quedé sin trabajo y estoy muy estresado, ¿qué puedo hacer?
Sé que este momento puede sentirse abrumador. Quedarse sin trabajo es un golpe fuerte, y es normal sentir ansiedad, miedo o frustración. No te castigues por lo que sientes, no significa que hayas fallado ni que esto vaya a durar para siempre. Tómate un momento para respirar y organizarte. ¿Qué puedes hacer hoy, por pequeño que sea, para acercarte a una solución? A veces, solo armar un plan o hablar con alguien de confianza ya nos ayuda a ver las cosas con más claridad. Trata de enfocarte en lo que sí puedes controlar: mantén una rutina, busca apoyo en personas cercanas y avanza paso a paso.
Llevo 3 meses sin laborar y me está afectando la salud mental...
Es completamente normal que después de tres meses sin trabajo te sientas desmotivado, ansioso o hasta un poco perdido. No tener una rutina estable o sentir que las cosas no avanzan puede afectar tu ánimo, tu sueño e incluso tu energía. Pero quiero que recuerdes algo: esto no define tu capacidad ni tu valor. Es una etapa difícil, sí, pero no permanente. Trata de cuidar tu bienestar en el día a día, aunque sea con pequeños hábitos, y no te aísles. Hablar con alguien o hacer algo diferente puede ayudarte más de lo que crees.
¿Qué puedo hacer si veo que las puertas se están cerrando y tengo familia a la que debo mantener?
Es normal sentirse abrumado cuando sientes que las opciones se van agotando sobre todo teniendo una familia que mantener. La incertidumbre nos juega en contra y la ansiedad hace que todo parezca peor de lo que realmente es, pero aquí lo importante es enfocarte en lo que sí puedes hacer. Quizás no está saliendo el trabajo que esperabas, pero ¿hay otras opciones que podrías considerar, aunque sean temporales? A veces, por la presión, nos cerramos a posibilidades que pueden abrir nuevos caminos. También es importante cuidar tu bienestar, porque si te desgastas mentalmente, se hace más difícil encontrar soluciones. Respira, apóyate en las personas cercanas y sigue adelante paso a paso. Esto no define quién eres ni tu capacidad, solo es un momento complicado que vas a superar.
¿Qué problemas de salud pueden originarse por el desempleo?
Cuando pasas por tanto estrés e incertidumbre, el cuerpo lo siente. Puede que te cueste dormir, que tengas dolores de cabeza más seguido o problemas digestivos. También es común sentirte agotado todo el tiempo, incluso sin hacer mucho, porque la ansiedad consume mucha energía. Es importante que prestes atención a estos signos y no los ignores. A veces, por enfocarnos en resolver lo urgente, dejamos de lado nuestra salud, pero si tu cuerpo no está bien, todo se vuelve más difícil. Trata de mantener rutinas básicas: dormir lo mejor que puedas, comer bien y darte pequeños momentos de descanso. Y si notas que estos malestares persisten o empeoran, no dudes en buscar ayuda. Cuidarte también es parte de salir adelante.
¿Qué ayuda debo buscar para manejar dicha situación?
Para empezar, si sientes que la carga emocional es muy grande, hablar con alguien de confianza puede aliviar un montón. Puede ser un amigo, un familiar o incluso un grupo de apoyo donde puedas compartir lo que estás pasando sin sentirte juzgado. A veces, solo el hecho de saber que otros entienden por lo que estás pasando, ya ayuda.
En cuanto a lo laboral, hay varias organizaciones y servicios que ofrecen orientación, como talleres de búsqueda de empleo o ayuda para mejorar tu CV. También, no subestimes las pequeñas oportunidades temporales o freelance, porque pueden ayudarte a mantener la calma mientras sigues buscando algo más estable. Y si el estrés y la ansiedad te están afectando mucho, no dudes en buscar ayuda profesional. Un psicólogo o terapeuta puede darte herramientas para manejar esos pensamientos y emociones que surgen en momentos de mucha presión.
Recomendaciones de la especialista
Permítete sentir: No te juzgues por lo que sientes, es normal.
Cuida tu bienestar: Duerme bien, haz ejercicio y come sano.
Red de apoyo: Usa tus contactos para abrir nuevas oportunidades.
Desarrolla tus habilidades: Haz cursos o talleres para estar actualizado.
Agencias de empleo: Regístrate en agencias que se ajusten a tu área.
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