Salomé Díaz, el encantador de perros de Lima Norte

Lima Norte tiene su 'encantador de perros', su 'César Millán'. Salomé Díaz camina en compañía de diez perros por las calles de San Martín de Porres. La gente se detiene al ver lo tan educados que son estos canes, incluso les toman fotos y algunos hasta intentan darle una propina al domador. “No, señores, yo no soy un artista de la calle, yo soy rehabilitador de perros”, aclara el joven de 36 años.

Salomé, ¿cómo empieza tu historia?
Desde muy pequeño sentí que tenía una conexión especial con los perros. Yo suelo rescatarlos de la calle para darles una vida mejor, claro que no es fácil rescatar a tantos animales y tenerlos bajo control.

¿Y cómo hiciste?
Un día estaba viendo el programa de César Millán y me pareció interesante la forma en la que él podía adiestrar a los perros usando la psicología canina. Decidí investigar al respecto y estudiarla, es así que desarrollé esta capacidad de rehabilitar perros.

¿Por qué le llamas rehabilitar?
Porque muchos de los perros que rescato de la calle son agresivos, por la misma situación en la que viven. Yo trato de unirlos a mi equipo para evitar que agredan a alguien o sean agredidos. Aquí les enseño a comportarse y a seguir órdenes.

Consideras a tus perros un equipo…
Sí, ellos son mi manada. Esa es la fórmula que tengo para trabajar. Cuando hay un perro agresivo, yo me acerco a él con mi manada. Son ellos quienes le envían el mensaje de que queremos incluirlo en nuestro equipo y de controlarlo en caso de que quiera hacernos daño.

¿De qué forma?
Los perros trabajan bajo una ley de territorio. Mi manada hace que el perro nuevo entienda que no es él el que manda y que hay reglas que debe seguir. Aprende a respetar al resto del grupo y por ende a mí. De esta forma aprende a seguir mis órdenes y a trabajar en equipo.

¿Cuando los paseas nunca se te escapan?
No, ellos saben que el paseo es una técnica de confianza entre nosotros. Compartimos el paseo, aquí nadie anda solo. Muchas veces les he quitado la correa a los que tienen más tiempo conmigo y nunca se alejan de nosotros. Mi objetivo es ampliar al grupo, andar con quince perros sin correa y que todos vean que los perros pueden ser disciplinados.

¿Crees poder lograrlo?
Por supuesto. He venido trabajando en esto por muchos años, confío en lo que puedo lograr con mis muchachos.

¿Qué recomiendas a las personas que tienen perros inquietos?
Que se hagan respetar y que se den un tiempo para ellos. Muchas personas pasan todo el día fuera de casa y llegan a consentir al animalito dejando que haga todo lo que quiera por premio. Ese es un mal mensaje, porque poco a poco están permitiendo que el perro domine la situación. Recuerden que ustedes son los líderes. (Michael Livia)