cuenta que estudiar Psicología la ayudó a mejorar su percepción sobre las relaciones sentimentales y, hoy que está por estrenar su show ‘Mana, date cuenta’, nos da algunos consejos para que no nos ‘nublemos’ por el amor y subraya que siempre se puede volver a empezar.

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Mónica, regresas a la tarima con un nuevo show llamado ‘Mana, date cuenta’, ¿de qué trata?

Sí, estrenamos el próximo miércoles en La Estación de Barranco. Todas, incluyendo también a los hombres, pasamos por un momento donde el amor nos nubla y no nos permite darnos cuenta de lo que está pasando. Eso hizo que muchas se identifiquen y también que sirva de experiencia. Es un show para mujeres y el mensaje es que no importa la edad que tengas, cuál sea tu situación, cuántos hijos tengas o lo que pases, siempre puedes volver a empezar.

¿El amor te ha nublado a ti?

A todos. El amor es una especie de droga, funciona en el cerebro como algún estupefaciente porque liberas neurotransmisores y eso genera que se viva con una realidad distorsionada. Yo estuve ciega un par de veces, no lo voy a negar, bien ciega.

¿Te fueron infiel?

No solo por una infidelidad, puede ser porque la otra persona no está dispuesta a dar el cien por ciento o no quiere lo mismo. Seguramente he pasado por infidelidades y tramposos, y ahora, gracias a que estudié (Psicología), mi percepción respecto al amor y las relaciones cambió para bien.

¿Ahora pones tus límites?

Antes de comenzar a estudiar ya había aprendido algunas cosas como poner límites, pero también me hizo entender qué me conflictuaba como persona. Creo que lo que más daño nos hace son los pensamientos disfuncionales, como por ejemplo que ‘uno por amor tiene que aguantar cosas’.

Como las infidelidades...

Las infidelidades están en el medio y al costado, hay una pandemia de infieles y “no hay vacuna para la ‘pipilexia’”.

¿Por qué tantos infieles?

Es una falta de compromiso gigantesca, porque quizás no estás seguro de que te quieres casar o estar solo con una pareja.

¿Cómo se castiga?

Hay infieles patológicos y circunstanciales, y el principal castigo para los crónicos es que las mujeres no lo acepten porque ya demostró que no puede comprometerse.

Pero existen mujeres tercas...

Ese es el tema, ‘Mana, date cuenta’, ja, ja, ja. Son insistentes en que quieren cambiar al hombre y tenemos un caso bien sonado en televisión. Hay una recicladora por ahí...

¿Te refieres a Karla Tarazona?

No digas el nombre porque está bien molesta, ofendida. Afortunadamente ya vendí todo (las entradas de junio y julio), igual gracias por tu buena fe.

¿Fueron amigas?

Siempre tuvimos trato de compañeras, no amigas. Entiendo que a algunas personas no les guste las bromas, pero es mi trabajo y punto, lo hago con mucho cariño. No tengo nada contra nadie.

¿Y cómo una mujer se quita la venda de los ojos?

Cada caso es diferente, hay que hacer mucha terapia y trabajar en el amor propio. Yo sí creo en las segundas oportunidades, pero no en las disculpas sin cambio de conducta.

Mónica Cabrejos cuenta que fundió los anillos de compromiso que le dieron y se hizo un aro más grande. (Foto: GEC/ Jesús Saucedo)
Mónica Cabrejos cuenta que fundió los anillos de compromiso que le dieron y se hizo un aro más grande. (Foto: GEC/ Jesús Saucedo)

FUNDIÓ SUS ANILLOS DE COMPROMISO

¿Crees que Christian Cueva cambie?

Si hace terapia a largo plazo, puede ser. Pero si él se engancha en una nueva relación va a repetir lo mismo, tiene que hacer terapia un par de años y no lo digo en mala onda.

Y su esposa Pamela López también...

Ahí hay una dependencia emocional de ambos, mientras no se cure el vínculo no será saludable.

¿Y tú continúas soltera?

No me he casado y no creo que me case nunca. No es que no crea en el matrimonio, pero soy una persona leal y comprometida cuando digo algo y siento que hay una cultura de decir una cosa y hacer otra.

Pero sí te han propuesto matrimonio...

Sí, hay hombres que me han amado y yo he amado, fui feliz el tiempo que duró.

¿Cuántos anillos de compromisos tienes?

Ni me acuerdo, fundí todos y los convertí en uno solo. Ahora tengo una sortija grande.

¿La usas?

La tengo guardada, para salir y trabajar uso pura fantasía. No uso joyas, como está la inseguridad ahora hasta el marido te roban, ja, ja, ja.

¿Te han ‘bajado’ a una pareja?

Cuando era jovencita una amiga, pero entendí que nadie te quita, el hombre se va porque quiere.

¿Tuviste amigos con trato de pareja?

No, yo no entro en eso, tengo las cosas claras. Desde antes de empezar le digo ‘quieres ser amigo’ o ‘amiguito’, para saber cómo me voy a comportar y cuánto tiempo le voy a dedicar. Los confundidos no me gustan. Es lo más saludable para ambos.

¿Hace cuánto no tienes pareja?

Hace muchísimos años, no quiero presentar a nadie públicamente. Tenga o no tenga pareja, aprendí que es privado.

¿Te ha tocado algún tóxico?

Me tocó alguien demasiado celoso, todo le resultaba desconfianza. Hasta se llega a un punto en que uno se convence de que está haciendo las cosas mal y eso es lo tóxico, porque si él tiene un tema de inseguridad debe ir a hacer su terapia y mejorar su autoestima.

Para terminar, ¿Qué mensaje le darías a las lectoras?

Que ya salen las entradas para agosto y decirles a las chicas que hay cosas que no debemos tolerar porque nos dañan profundamente a nivel emocional y psicológico. Y, cuando veamos a una amiga, hermana o mujer que necesita ayuda, así no nos lo pida, ayudémosla. Si una puede, todas ayudamos

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