
Este jueves, el periodismo peruano amaneció de luto. Esta mañana se confirmó la muerte del periodista Álamo Pérez-Luna a los 61 años. Sus restos se encuentran en el velatorio 4 del Hospital Edgardo Rebagliatti.
La noticia ha conmovido al gremio de comunicadores y a miles de seguidores que lo recuerdan por su estilo crítico y frontal en diversos programas de televisión.

En mayo de 2024, Pérez-Luna había hecho pública su situación de salud con un mensaje en su cuenta de Twitter, donde relató que estuvo internado por casi tres semanas en el hospital Edgardo Rebagliatti.
“Del 29 de abril a este 18 de mayo he estado internado en el Hosp. Rebagliati. Me descubrieron un tumor maligno (cáncer) en el riñón y lo extirparon. Estoy en reposo absoluto hasta dentro de varias semanas. Gracias a los profesionales del Rebagliati y a todo el personal. Gracias.”, escribió entonces. Desde ese momento, se mantuvo en recuperación, aunque su estado se habría agravado en las últimas semanas.

La noticia de su muerte fue difundida a través de redes sociales por colegas, seguidores y medios locales, que expresaron sus condolencias y reconocieron el legado del periodista.
Aunque no se han dado detalles oficiales sobre la causa exacta de su fallecimiento, se presume que estuvo relacionada con las complicaciones derivadas de la enfermedad que lo aquejaba.
¿Quién fue Álamo Pérez Luna?
Álamo Pérez Luna fue una figura clave en la televisión peruana durante los años 90 y 2000. Su carrera despegó en el ámbito del periodismo, donde se hizo conocido por su estilo directo, sin filtros, y por liderar espacios que analizaban la realidad nacional y el espectáculo con un enfoque incisivo. Fue parte de importantes medios como Panamericana Televisión, ATV y Frecuencia Latina, además de escribir columnas en distintos diarios.
Con el tiempo, también incursionó en otros géneros periodísticos y se desempeñó como director de comunicaciones en instituciones públicas. A pesar de su tono polémico, siempre fue reconocido por su aguda mirada sobre la realidad mediática y por formar parte de una generación de periodistas que marcaron época en la televisión nacional. Su partida deja un vacío en la historia del periodismo de espectáculos en el Perú.
