Marino Valencia, líder de ‘Los Diablos Rojos’ y compositor de temas como ‘Pedacito de mi vida’ y ‘Ojitos hechiceros’, comentó que está escribiendo un libro sobre la historia de la cumbia peruana y busca que se pueda institucionalizar el Día de la cumbia.
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“Tengo 50 años como músico, empecé de muchachito a los 18 años y, por eso, estoy escribiendo un libro sobre la historia de la cumbia peruana, hay mucho que contar y las nuevas generaciones tienen que aprender”, señala Marino Valencia, quien este sábado 20 de julio realizará un show en el Centro de Convenciones Bolívar, en Pueblo Libre.
También, se ha comentado que a la cumbia peruana le falta un día de celebración...
Así es. Ese es otro proyecto que he empezado, vamos a empezar a recavar firmas para que eso se institucionalice. La música criolla tiene su día, la música andina y la cumbia no; siendo el género más escuchado en el país, en todas partes se baila, se escucha y disfruta la cumbia. Además, en todos los sectores socioeconómicos.
¿Próximamente a dónde se irá de gira?
Este sábado 20 de julio estaré con Los Diablos Rojos en el Centro de Convenciones Bolívar, en Pueblo Libre. Y luego, el 24 de julio viajó a Estados Unidos donde actuaré al lado de Óscar de León. Voy a estar en Nueva York, Washington y Virginia; para poder hacer bailar a los compatriotas con mis temas bandera ‘Pedacito de mi vida’ y ‘Ojitos hechiceros’.
¿Cuál de esos temas es el que más versiones tiene?
Pues, ‘Pedacito de mi vida’, creo que si te dijo 100 versiones me quedo corto. En México lo ha grabado la Sonora Santanera y estuvo incluido en una película.
En Europa también hay un movimiento grande con los grupos de cumbia de los setentas...
Sí, allí están sonando fuertes los temas instrumentales; así como en Japón. Mis temas como ‘Chacarero’ y ‘Malambo’ que nacieron en los años 70 se tocan fuerte en esos países. En octubre debo ir a Europa, y estaremos presentándonos en festivales.
Fue una gran generación musical...
La generación del 70 fue muy buena con Enrique Delgado, Los Destellos, Los Diablo rojos, Los Ecos, Los Beta 5 y El grupo Celeste.
Pero usted empezó tocando música criolla...
Mi sueño era grabar un disco de 45. A la edad de 18 años ya tocaba la guitarra criolla en locales como La Palizada, Sachún. También tocaba el requinto para los boleros. He podido grabar con Pedrito Otiniano, Luis Abanto Morales. Luego, Enrique Lynch me invitó a grabar cumbia, un instrumental y cumplí mi sueño.
Luego, ¿qué vino?
Pues, logré vender más de 50 mil discos y me quedé en Sonoradio grabando hasta el año 90, y debo haber grabado unos 50 Lps. Como vendía bastante, grababa hasta tres discos por año.
¿Y ahora sigue grabando?
Claro, tengo un estudio de grabación y sigue componiendo. Hace unos quince días ha salido mi último disco que se está distribuyendo en Europa.
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