Juan Manuel Vargas y Blanca Rodríguez nos dieron una entrevista que pocos olvidarán. (Allengino Quintana)
Juan Manuel Vargas

Por: Fernando 'Vocha' Dávila y José 'Huachano' Lara

Juan Manuel Vargas y Blanca Rodríguez. Todos los buscaban, pero escogieron a Trome para hablar por primera vez sobre esos temas difíciles. y Blanca Rodríguez decidieron dar sus versiones y dejar conocerse mejor. Empezamos. 3, 2, 1, va.

Una mano delicada recorre el mentón tupido de una barba espesa. Lo acaricia, le pasa la yema de los dedos y lo ‘obliga’ a girar. deja escapar una sonrisa y se siente ‘vencido’ por tamaña demostración de cariño y sus ojos locos se pierden en los de la mujer.

Acá están Blanca Rodríguez y Juan Manuel Vargas, la pareja que todos apostaron que se separaría. Ellos, como un buen par de ‘dementes enamorados’, decidieron ir, una vez más, contra la corriente y siguen juntos, mucho más que antes. Hay una bisagra en su amor y no tienen temores para recordarlo.

BLANCA: CUANDO SE ME DECLARÓ SE PUSO SERIO Y NERVIOSO

Blanca, define a Juan...
Un hombre de buen corazón. Tengo seis hijos y él es el mayor.

Por sus actos pareciera que no es tan bueno.
Se equivocó, pero no se contaminó.

¿Eso ha sido determinante para que se reconcilien?
En esos momentos complicados, nunca dejó de decirme que me amaba.

¿Qué hizo que la relación no se acabe?
Jamás dejamos de ser amigos.

¿Conclusión final?
Juntos podemos superar todo.

Tiene pinta de engreído.
Me reclama ¿por qué no me besas?, ¿por qué no me abrazas?

¿Es mano abierta?
Sí y a veces se le va la mano.

¿Celoso?
Sí y desde siempre.

Cuéntame una.
Se peleó con cinco albañiles porque me dijeron una tontería. Yo me fui, ya se lo había advertido.

¿Cuántos medios te llamaron para declarar?
Varios, hasta me ofrecieron miles de dólares, pero no acepté.

¿Pero no hubiera sido bueno aclarar las cosas?
Si no se habla, se especula, por eso hablo una vez y nunca más.

¿Y hay que corregirlo mucho?
En realidad lo hago con todos, los chicos y él.

¿Opinas sobre sus peinados?
Hace lo que quiere con su pelo y, si no me gusta, se lo hago saber.

En la cancha parece un ‘Terminator’, ¿en casa?
Juguetón.

¿Cómo es una esposa sabia?
Cuando corrige a los chicos, así no tenga razón, no le digo nada, no puedo desautorizarlo. Pero a solas sí se lo comento.

¿Cuando se declaró también fue gracioso?
Se puso serio y nervioso: ‘No te vayas a molestar con lo que te voy a decir’ y después de repetirlo varias veces me dijo si quería ser su enamorada.

¿Aceptaste al toque?
Me dio risa y pensé: ‘Dios mío, qué voy a hacer con este chibolo’.

¿Te llevaba a lugares ‘sufriditos’?
Yo estudiaba en la avenida Brasil y saliendo de mi facultad, iba a su casa y de allí nos íbamos caminando hasta mi domicilio en La Victoria.

Asu, es una ‘lataza’.
Me cargaba en sus hombros y, cuando sentía que las piernas le flaqueaban, me bajaba.

¿Su primera gran cena?
En Kentucky Fried Chicken.

¿Te gustó a primera vista?
No, pero hacía bromas y me llamaba la atención.

¿Cuándo se dio el ‘flechazo’?
Cuando una chica me comentó que le gustaba y sentí algo en el corazón. Me dio celos y con una amiga inventamos una historia.

¿Cuál?
Le dijimos a esa chica que otro muchacho estaba interesado en ella y se la creyó.

Solo queda felicitarlos porque siguen de pie pese a las tempestades.

A mí no me gusta declarar, soy arrochada, pero él me dijo: ‘Es para Trome, tenemos que salir’ y acá estoy.

JUAN: BLANCA NO SABE CUÁNTO GANO

Juan Manuel Vargas se puso reacio a ponerse una camisa. Primero se disforzó y aseguró que no iba a cambiar por una entrevista. Luego aceptó a regañadientes. Y finalmente, se sentó al lado de su esposa y al escuchar cada respuesta, era un ‘concierto’ de muecas que nos regaló.

‘Loco’, ¿después de la tempestad?
Viene la entrevista a Trome.

¿Celoso?
Cuido mi territorio.

¿Blanca sabe cuánto ganas?
No, para qué.

¿Macho que se respeta ayuda a limpiar?
Mi lugar es junto a la mesa del billar y viendo películas.

¿Machista?
Un poco.

¿Es bueno que la mujer use ropa chiquita?
No me gusta que use shorts cortitos, además tiene 5 hijos.

¿Tiene la contraseña de tu celular?
No se la doy, pero averigua.

Un acto de amor.
Cuando vivimos en Argentina, preparó un arroz chaufa recontrasalado y me lo comí todo. Eso sí, tomé harta agua.

¿La fama te mareó?
Me sentí dueño del mundo, me volví soberbio.

¿Qué parte de la casa tiene tu mano?
Ella eligió todo, desde los muebles hasta la decoración.

¿Quién es más duro para corregir?
Cuando habla, espero. Y cuando me toca, guarda silencio.

Imagino que eres muy cuidadoso con tus amigos.
Cuando hago una reunión, invito a gente que conozco y si un amigo trae un pata, le digo que se lo lleve.

¿Y eso?
Somos hombres, tengo hijas, una mujer y un desconocido puede mirar a alguien de una manera no adecuada.

¿Eso es desconfiar?
Yo creo en ella, pero no de la otra parte. Y te cuento algo más.

Dime.
Cuando juego con mis patas billar, no dejo que se acerquen mis niñas, porque hay muchos varones.

¿Cariñoso con tus pequeños?
Les jalo el cabello, les meto un lapo. Nada fuerte, es mi manera de expresarles que los quiero mucho.


Me cuenta tu señora que reclamas abrazos, besos.
Es que mi abuela me crio así y desde que falleció, es lo que más extraño.

¿Contador de chistes?
Cuento los mismos, pero Blanca siempre se mata de risa.

¿Gastas harto billete en ropa?
Ya me compré, me di mis gustos, ahora todo es para los chicos.

Por ‘enésima’ vez, gracias a nombre de Trome.

Nos llamaron de un montón de revistas, pero elegimos a ustedes y ya saben, después de esto, me buscan recién en el 2018, ja, ja, ja

Si te interesó lo que acabas de leer, puedes seguir nuestras últimas publicaciones por , , y puedes suscribirte a nuestro newsletter.

NOTICIAS SUGERIDAS

Contenido GEC