Seguir encerrado en su mansión de Río de Janeiro producto de la pandemia de Coronavirus y no recibir la llamada de los dirigentes de PSG para pedirle que vuelva a París al parece están generando un crisis de ansiedad a Neymar quien ya suma un mes de confinamiento pero bajo la supervisión de su preparador físico personal, Ricardo Rosa.
Esta crisis que no la calmar los 'Toiss’ quienes viven en la residencia de Neymar que cuenta con piscina, cancha de tenis y de fútbol playa. El jugador del PSG ha requerido la presencia del jugador de Palmeiras, Lucas Lima, quien también realiza los trabajos de preparación física en Mangaratiba, junto a Ricardo Rosa.
“No saber cuándo vamos a regresar me provoca ansiedad. Realmente extraño jugar, competir, el ambiente del club, mis compañeros de equipo del PSG. Realmente extraño el fútbol ”, señaló Neymar.
El jugador también es consciente que esta misma ansiedad la comparten los hinchas que esperan el regreso de la competencia deportiva. “Estoy seguro de que la gente también nos quiere ver a todos en el campo lo antes posible. Espero que la decisión se produzca lo antes posible”, agregó el jugador del PSG.
El preparador físico hace que Neymar mantenga una rutina de trabajo físico y de ese modo mantenerse en forma de cara a su posible regreso a la normalidad. El profesional acondicionó las instalaciones de su casa en Mangaratiba, donde aprovecha el espacio para trabajos con balón, siempre con las medidas de seguridad en medio de la cuarentena.
Ricardo Rosa es un profesional que se ha encargado de la preparación física de Neymar en los últimos diez años. Esta preparación pasa por la alimentación (desayuno), cargas de trabajo y de descanso. Trabajo recreativo y también específico que se dividen en dos períodos.
“Buscamos hacer una gran variación de métodos, volumen e intensidad de trabajo, diversificando entre entrenamiento general y específico, con balón”, ha explicado Ricardo Rosa.