¿Enemigos? Para nada. José Mourinho y Josep Guardiola, rivales históricos desde la Liga española parecen haber dejado atrás esos enfrentamientos personales en los clásicos de España. El técnico de Manchester United y el estratega del Manchester City ya habían cruzado un saludo (10 de septiembre) por la Premier League.
Hoy lo han vuelto hacer envueltos en sonrisas y con unas palmaditas de afecto antes del partido de octavos de la Copa de la Liga inglesa en Old Trafford y que terminó 1-0 a favor de los ‘Diablos Rojos’.
Los reporteros gráficos se frotaban los ojos, pues no podían creer que Mou y Pep se hayan estrechado en un abrazo, incluso sonriendo antes de ir cada uno a su banquillo. El portugués incluso se animó a dedicarle unas palabras, presagiando que eliminaría a los ‘Citizen’.
De esta forma, José Mourinho pudo recuperar la sonrisa con un triunfo que sabe muy dulce, frente a Josep Guardiola, uno de sus grandes enemigos desde la época en la que construyeron una mediática rivalidad cuando entrenaban a Real Madrid y FC Barcelona, respectivamente.
La victoria supone además una bocanada de aire para el portugués, criticado en las últimas semanas y que venía de caer el domingo por 4-0 en el terreno del Chelsea, en su regreso a Stamford Bridge. El United además lleva un mes sin ganar en la Premier League y ha bajado al séptimo puesto. “Me da igual si el triunfo es bueno para mí. Lo que sí es importante es la felicidad de la gente”