El portugués José Mourinho ha revelado que su vida en Manchester (noroeste de Inglaterra) es "un poco un desastre" por el constante seguimiento que le hacen la prensa y los fotógrafos, acampados a diario en la puerta de su hotel.
José Mourinho, de 53 años, fue nombrado entrenador del Manchester United el pasado mes de julio, con un contrato de tres temporadas con opción a una cuarta, después de la marcha del holandés Louis van Gaal.
Desde su llegada a la ciudad, el técnico luso, que en el Manchester United gana en torno a los 10 millones de libras por temporada (11,2 millones de euros), vive solo en el céntrico y lujoso Lowry Hotel, sin la compañía de su familia, puesto que su mujer, Tami, y sus dos hijos han preferido quedarse en Londres.
Su hija, Matilde, estudia en la universidad en la capital británica, mientras que su hijo, José Jr, firmó un contrato de dos años con las categorías inferiores del Fulham.
"La realidad es que mi hija cumplirá 20 años la semana que viene y mi hijo tendrá 17 en un par de meses. Ahora están muy bien allí: universidad en Londres, fútbol en Londres, amigos en Londres", dijo José Mourinho, en una entrevista con la cadena británica Sky Sports.
"Están en una edad en la que no pueden venir detrás de mí como lo hacían antes. Por primera vez, la familia está viviendo de forma diferente, así que vamos a intentar ver cómo evoluciona todo y cómo podemos afrontar esta situación", señaló el portugués.
José Mourinho, además, lamentó la persecución y el constante seguimiento de la prensa y de los 'paparazzi', que acampan fuera de su hotel y lo persiguen cada vez que sale a dar un paseo o a almorzar en un restaurante.
"Ya saben cómo es la historia de los 'paparazzi'. Para el hotel y para la ropa que me patrocina es maravilloso porque están ahí todos los días y sale en las fotos", aseguró.
"Pero, para mí, es un poco un desastre porque a veces quiero ir a dar un paseo y no puedo hacerlo o quiero cruzar el puente para ir a un restaurante y tampoco puedo", indicó.
"Sin embargo, tengo aplicaciones en el móvil para pedir comida y me la traen a la habitación, y eso es lo que hago a veces", ironizó José Mourinho.