¿Tienes un negocio y piensas contratar a un influencer? Antes de contratarlo debes analizar bien su entorno, saber quiénes lo siguen, qué mensajes brinda a la comunidad y si realmente le puede funcionar a tu negocio.
Debes tomar en cuenta que muchos solo son movidos por el interés económico (que les pagues), lo cual no siempre es sinónimo de fidelidad, pues así como están hoy contigo, mañana podrían estar con otra marca. Al respecto, Fernando Saldarriaga, Gerente de Marketing Digital de MileniumGroup, precisó que la conexión entre un influencer y una marca no siempre tiene que ser el dinero.
“Después de más de 20 años en el mercado hemos llegado a la conclusión que el dinero no siempre es el mejor pago para un influencer. Ahora, lo que sí es importante es la inversión en la campaña. Nosotros recomendamos invertir en el contenido, en la relación con el influencer y finalmente invertir -si es que se puede- en analítica para saber, cómo está funcionando la campaña”, precisó Saldarriaga.
Pero, ¿cómo elegir al adecuado?
- Elige con cuidado. Ve más allá de sus seguidores, no te dejes engañar por el alcance. Debes priorizar la relación del influencers con su comunidad. Reduce riesgos revisando el contenido previo para estar seguros que es el correcto.
- Evalúa al influencer. Encuentra una coincidencia genuina entre la marca y el influencer, debes conocer cuál es su interés real antes de asumirlo como parte de tu grupo de trabajo.
- La inversión es necesaria, pagarles no. Invierte en tu contenido y crealo con él. Muestrale que tan importante es para ti y tu marca e invierte en los resultados, en la analítica de tus campañas.
- Sé ingenioso. Algunas audiencias son difícil de captar. Por eso, debes buscar un influenciador que sepa conectar con este público y quizá no se encuentre en las plataformas. Hay que hacer un sondeo amplio antes de contratar a un influencers.
DATO: Según cálculos de la revista estadounidense Wired, solo en el 2019 en América Latina, los negocios invirtieron cerca de 500 millones de dólares en el pago de influenciadores y ni que hablar de Estados Unidos, donde se llegó a pagar alrededor de 8 mil 200 millones de dólares por estos servicios. Incluso, según los mismos cálculos se prevé que en el 2020 se cierre pagando 10 mil millones a los influenciadores.