
En un partido lleno de emoción y con un cierre para la historia, el FC Barcelona se consagró campeón de la Copa del Rey tras vencer al Real Madrid por 3-2 en la prórroga, en un vibrante encuentro disputado en el Estadio La Cartuja de Sevilla. El héroe de la noche fue el defensa francés Jules Koundé, quien, a pocos minutos de que se agotara el tiempo suplementario, aprovechó un error de Luka Modric en salida de balón para marcar un golazo que sentenció la victoria azulgrana.
El partido comenzó con un primer tiempo muy disputado. El Barcelona se adelantó gracias a un gol de Pedri, pero el Real Madrid no tardó en reaccionar en la segunda mitad. Kylian Mbappé y Aurélien Tchouaméni marcaron para los blancos, llevando la esperanza de la remontada al conjunto de Carlo Ancelotti. Sin embargo, cuando todo parecía indicar que el partido se definiría en los penales, Koundé apareció para dar un golpe de autoridad.
El francés se anticipó a un pase de Modric hacia Brahim Díaz, se acomodó y, desde fuera del área, disparó un remate raso que venció al portero Thibaut Courtois. Un gol que será recordado como una obra maestra, y que deja al Barcelona como el equipo más exitoso en la historia de la Copa del Rey, con 32 títulos en su haber.
Con esta victoria, el conjunto de Hansi Flick amplía su dominio histórico en el torneo, alejándose aún más del Real Madrid, que cuenta con 20 copas. Este triunfo también consolida al Barcelona como el club con más finales ganadas en la historia del certamen.