La historia de , esta llena de lecciones de vida y una de ellas ha sido contada por el propio jugador para ayudar a todos los niños que alguna vez han sido víctima del Bullying como le pasó a la estrella del producto de la cicatriz que hasta hoy lleva en el rostro y de como el fútbol lo ayudó a superar su situación. 

Frank Ribery, quien sufrió esa terrible cicatriz luego de un accidente de tránsito cuando tenía apenas 2 años. El pequeño recibió 100 puntos de sutura que lo dejaron con el rostro desfigurado. Sin la ayuda de sus padres, quienes lo abandonaron cuando nació el pequeño sufrió el maltrato de sus compañero del albergue donde creció.

El aspecto de Frank Ribery era motivo de burla y ensañamiento. Los chicos del convento lo llamaban 'Frankenstein'. En el colegio el volante del Bayern Munich, también vivió un infierno hasta que descubrió la felicidad con un balón en los pies. Jugar al fútbol se convirtió en el 'salvavidas' perfecto para el acoso que le rodeaba.

"De pequeño se burlaban de mí y me escondía a llorar en un rincón. Pero eso me ha ayudado en la vida. He sufrido por esta cicatriz, pero me ha hecho más fuerte. Si no eres fuerte en tu cabeza, eres hombre muerto", dijo el jugador del Bayern Munich.

Frank Rivery, reconoció tambipen que no se operaría las cicatrices para mejorar su estética. Estas formaban parte de su vida, marcaban el sufrimiento que pasó hasta llegar donde está.

El exitoso jugador de Bayern Munich, que en algún tiempo trabajó como albañil, también empezó a profesar la religión musulmana, de la que también es parte su esposa Wahiba Ribery quien le perdonó una infidelidad. Ahora el francés para el mundo musulmán se llama: Bilal Yusuf Mohammed.

NOTICIAS SUGERIDAS

Contenido GEC