La actriz estadounidense Jessica Walter, conocida para las audiencias más recientes como la ácida abuela de la comedia de culto “Arrested Development”, falleció a los 80 años, afirmó su agente este jueves a la AFP.
Ganadora de un Emmy, la intérprete apareció en docenas de series y películas como “Play Misty for Me”, de Clint Eastwood, o el papel con el que cosechó su primer éxito en “Grand Prix” en 1966, antes de dar vida a la desquiciada, y aficionada a los Martinis, Lucille Bluth en “Arrested Development”.
“Con gran pesar, confirmo el fallecimiento de mi querida madre Jessica”, anunció su hija Brooke Bowman en un comunicado. “Actriz en activo durante más de seis décadas, su mayor placer era llevar alegría a los demás a través de sus narraciones, tanto dentro como fuera de la pantalla”.
“Si bien su legado permanecerá a través de su trabajo, también será recordada por muchos por su ingenio, clase y alegría de vivir en general”, agregó.
La original historia de una familia rica y profundamente disfuncional de California, “Arrested Development” cosechó los aplausos de la crítica durante su primera emisión en Fox antes de ser cancelada en 2006.
Tras una apasionada campaña de su legión de fans, la serie revivió más tarde en Netflix para dos temporadas más, y está considerada como una de las sitcoms más influyentes de los últimos tiempos.
La serie estaba protagonizada por Jason Bateman, Will Arnett, Michael Cera y Portia de Rossi, con Ron Howard como productor ejecutivo y también narrador.
“Ella era una fuerza y su talento y cadencia no tenían comparación. Descansa en paz, Mama Bluth”, tuiteó su compañero en la serie Tony Hale.
“Te quiero, Gangie”, añadió de su lado la intérprete Alia Shawkat, usando el apodo cariñoso con el que la familia se refería a Lucille.