MÁS INSEGURIDAD. Varias personas que almozaban en un chifa de San Isidro vivieron momentos de terror cuando un delincuente armado ingresó al restaurante para barrer con las pertenencias de los comensales. Sin embargo, su objetivo principal era un reloj de alta gama valorizado en más de cinco mil dólares.
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El ladrón ingresó al local, que se inauguró hace unos meses, cogió una carta y se sentó en una mesa. Luego se para y pregunta por un plato, para después sacar su arma y amenazar a los trabajadores. Después se acercó a una mesa, rastrilló su pistola y les apuntó en la cabeza a los clientes
En esos pocos segundos se hizo con un par de celulares y dos relojes. Mientras, su cómplice lo esperaba en una moto a las afueras del chifa. Ambos conversan en la calle y al parecer el delincuente se había confundido de objetivo, por lo que vuelve a entrar al restaurante.
Esta vez sube al segundo piso del local, donde una familia estaba a punto de almorzar. Es en ese momento que apunta con su arma a un niño y luego le pide a su padre que le entregue sus pertenencias. Alterado, el delincuente amenaza a su víctima con el arma para quitarle su celular y su reloj.