La leche materna es esencial para el desarrollo del bebé, proporcionando nutrientes ideales y anticuerpos que fortalecen su sistema inmunológico. Favorece un crecimiento saludable y reduce el riesgo de enfermedades como infecciones respiratorias y alergias. Además, fortalece el vínculo entre madre e hijo y contribuye a la salud materna, ayudando a reducir el riesgo de cáncer de mama y ovario. Pero, ¿si la madre lactante tiene anemia, la leche materna puede tener un déficit de nutrientes? Hablamos sobre este tema con Guilianna Saldarriaga, nutricionista de la Clínica Internacional.
Licenciada, ¿qué pasa cuando una madre lactante tiene anemia?
Que la madre tenga anemia no afecta la composición nutricional de la leche materna. Más bien afecta a la misma mujer porque sentirá fatiga, cansancio y debilidad. Lo que sí se verá es que habrá una menor producción de leche.
No afectará al bebé...
Durante el tiempo de lactancia, no. Conforme pasen los meses el pediatra determinará si es necesario darle al bebé un tipo de suplemento o una leche adicional.
Pero, ¿habrá alguna consecuencia?
Durante el embarazo, sí. Porque hay un mayor riesgo para la madre de tener preeclampsia (hipertensión arterial), eclampsia (presencia de convulsiones generalizadas inexplicables), diabetes gestacional y hasta depresión postparto. Y el bebé puede nacer con bajo peso o tener complicaciones en su desarrollo.
Se piensa que si la madre tiene anemia, el bebé también, ¿es cierto?
No necesariamente.
¿Qué debe hacer la mamá para superar este mal?
Tiene que potenciar las fuentes de hierro en su alimentación diaria, tanto las de origen animal como vegetal. Tiene comer hígado de res y de pollo, sangrecita, vaso, carnes rojas.
A veces mezclamos muchas fuentes de hierro, ¿está bien?
Debemos tener cuidado con eso porque algunos alimentos pueden interferir con la buena absorción del hierro. Por ejemplo, quizá estamos acompañando las lentejitas con vegetales de color verde como la espinaca, acelga, lechuga o brócoli. O tal vez con un vaso de leche. Lo ideal es hacerlo con una fuente de vitamina C.
Y la manera de prevenir la anemia antes del parto es...
Seguir una dieta balanceada y acudir a los controles médicos y con el nutricionista durante toda la gestación y seguir durante los primeros meses del bebé.
+datitos
♦Una mujer gestantes debería tener 12,5 g/dL de hemoglobina, si está entre 11 y 12 g/dL ase considera de riesgo.
♦Es recomendable planificar el embarazo, así la mujer prepara su cuerpo para que no tenga ningún problema o complicación durante los nueves meses de gestación.
♦Durante la lactancia la mujer debe consumir alimentos de origen animal (carnes, aves, pescado) y con alto contenido de fibra (cereales). Además, incluir frutas, verduras y lácteos.