El uso de las bicicletas se ha incrementado en la capital, debido a que las personas han encontrado una forma segura de movilizarse para evitar posibles contagios por COVID-19. Sin embargo, también se ha elevado el número de robos de estos vehículos de dos ruedas durante el estado de emergencia, según un informe de Cuarto Poder.
El dominical informó que sujetos inescrupulosos solo necesitan de una cizalla para apoderarse de las bicicletas que sus dueños dejan estacionadas en diversos puntos de la capital.
Tal es el caso del distrito de Miraflores, donde cámaras de seguridad muestran el hurto de bicicletas que luego son llevados a lugares clandestinos, uno de ellos ubicado en la quinta de la calle Angaraes (Cercado de Lima) para pintarlos de otro color y ponerlos a la venta.
“Las pintas, claro. Las lijamos bien, pero están operativas y corren, pues. Ahí no importa que sean aluminio. Hay de aluminio que no corren nada compadre. Yo te la dejo operativa y te vas embalado mano”, señala uno de los vendedores.
Asimismo, uno de ellos refiere que el único requisito para que la bicicleta pueda ser vendida es que se cambie de color para que los dueños no lo reconozcan.
“Me la trajo un pata. Te la llevas pintando. ¿Las vas a chambear por Lima? Te pregunto, o sea, si es así no pasa nada”, señala el vendedor.
Ante esto, la persona que se hace pasar como comprador le indica lo siguiente: “Mi ruta es Surquillo y Arequipa, No vayan a verla por ahí”. A lo que responde el vendedor: “No, no. Es que si yo te la doy como está ahí sí el dueño la reconoce. Entiendes, pero la voy a pintar”.
Ante esto, agentes de la Región Policial de Lima Centro realizaron una operación y encontraron gran cantidad de bicicletas robadas y hasta sillas de ruedas. Ante el incremento de robo, la Policía Nacional instó a la ciudadanía a tomar precauciones para evitar ser víctimas de los ladrones.