TERRIBLE. Un nuevo caso de feminicidio ha dejado consternados a los peruanos. Esta vez ocurrió en la región Tumbes, en el asentamiento humano Santa Catalina, en el sector Pampa Grande, donde un desalmado sujeto asesinó, torturó y calcinó el cuerpo de la mujer que decía amar y que, además, estaba esperando un hijo de él.
El pasado 5 de julio, el confeso asesino, identificado como Absalón Frank Urbina Chapilliquen (28), apuñaló a Leydi Brillith Álvarez Romero, una joven de 25 años, con un cuchillo, metió su cuerpo en un bidón y luego le prendió fuego. El cadáver de la víctima, quien tenía 4 meses de gestación, fue encontrado en un basural.
Pero no existe crimen perfecto. Un vídeo captado por una cámara de seguridad fue elemental para dar con el primer sospechoso de la muerte de la joven. Eran cerca de las 4 de la madrugada cuando Absalón Urbina fue captado trasladando un cilindro de agua en una especie de carrito. Más tarde se descubriría que en este depósito llevaba los restos de Leydi Álvarez, a quien había asesinado.
Los restos de la mujer habrían sido hallados por familiares de la víctima cuando estos estaban siendo incinerados en un basurero de su sector. Inmediatamente dieron la alerta a la Policía Nacional (PNP), la cual llegó al lugar para constatar los hechos y proceder con las diligencias de ley.
El macabro hallazgo fue posible gracias a las prendas de vestir y algunas joyas que ayudaron a identificar a la joven. Además, uno de sus pies no fue calcinado completamente, lo que también facilitó su identificación por parte de los familiares.
CONFESÓ EL CRIMEN
Horas después del reporte, las autoridades policiales lograron capturar a Frank Urbina cuando se encontraba en el domicilio donde ocurrieron los hechos. De acuerdo a su testimonio, horas antes del crimen estuvo bebiendo licor con su pareja en un bar. Luego se dirigieron a su vivienda y tras una discusión terminó asesinándola con un arma blanca.
El sujeto alegó defensa propia, no obstante, las autoridades han hallado dos cuchillos en el lugar que ahora forman parte de la investigación que ayudará a determinar más detalles del feminicidio.
Según el general PNP Javier Gonzales Novoa, el feminicida tenía antecedentes por robo agravado en dos oportunidades, 2022 y 2023.
FAMILIARES PIDEN JUSTICIA
Tras conocerse la noticia, más de cien personas, incluyendo amigos, familiares y vecinos, se congregaron en la puerta de ingreso del complejo policial Teniente Jorge Taipe Tarazona para exigir justicia y la intervención del Ministerio de la Mujer.
Lady Álvarez deja una hija de cuatro años en la orfandad. La familia de la víctima, devastada por la tragedia, se encuentra a la espera de la entrega del cuerpo, que ha sido retrasada por la necesidad de una evaluación adicional por parte de un forense.
Durante el velorio, donde solo se pudo velar la ropa de Álvarez Ramírez debido a la condición de los restos, la familia expresó su profundo dolor y exigió justicia.
“Nos llamaron diciendo que a Lady la habían quemado. Al principio no lo creíamos, luego confirmamos la noticia en la morgue. Es monstruoso, él la descuartizó y la quemó mientras estaba embarazada. Pedimos a la ministra que nos entregue el cuerpo. Necesitamos justicia y cadena perpetua para él”, dijo un familiar.
Finalmente, solicitaron la intervención del Ministerio de la Mujer para asegurar una investigación adecuada y pidieron que el caso sea tratado como feminicidio, dada la brutalidad del acto y el hecho de que la víctima estaba con cuatro meses de gestación.