Un suboficial de tercera que es el encargado de custodiar a los detenidos del calabozo dentro de la comisaría de Piura, arrojó positivo para COVID-19 lo que ha activado la alerta en dicha dependencia policial donde trabajan más de 140 policías que día a día luchan para que la población cumpla con el aislamiento social obligatorio y toque de queda, en Piura.
De acuerdo al informe N° 019 -2020-I-MACREPOL-PIU/REGPOL-DIVOPUS PIU -COM. PIURA “A”-O1, el referido suboficial comenzó a sentirse mal de salud el pasado 9 de abril por lo que acudió al centro de salud Almirante Miguel Grau, donde el médico de turno, por los síntomas que presentaba lo envió a realizar cuarentena por 10 días en su vivienda; sin embargo, ante la incertidumbre, el último jueves acudió al hospital Cayetano Heredia en el distrito de Castilla, donde los doctores le confirmaron que había sido contagiado de coronavirus.
Ante ello, 11 agentes que tuvieron cercanía con el caso positivo pasaron por la prueba rápida de COVID-19 en la Sanidad de la Policía arrojando negativo. El referido policía, trabajó durante el Estado de Emergencia su turno de 24 horas y retén, por lo que tuvo contacto con una gran cantidad de sus colegas.
No se descarta que el agente infectado haya contraído el coronavirus, de algún detenido, debido a que su trabajo era dentro de la comisaría de Piura.
Personal de Ministerio de Salud en coordinación con la Sanidad de la Policía, realizó la desinfección de todas las áreas de la comisaría de Piura, incluyendo la parte posterior donde funcionan las oficinas de la Policía de Turismo y Región Policial.
En la región, sumarían nueve casos positivos de policías infectados por el COVID-19. En la Unidad de Radio Patrulla, se confirmó el caso de otro agente infectado.