A mes y medio del fallecimiento de Gonzalo Israel Flores Córdoba, quien murió decapitado mientras realizaba la reparación de un ascensor en el Hospital Regional de Moquegua, la Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (Sunafil) constató la existencia de infracciones administrativas muy graves en seguridad y salud que contribuyeron con el fatal accidente.
Los inspectores de Sunafil determinaron que la empresa Electrónica de Elevadores S.L. Sucursal Perú (Edel) no cumplió con las obligaciones en materia de identificación de peligros y evaluación de riesgos laborales.
Tampoco cumplió con las obligaciones en materia de notificación o aviso de accidente de trabajo mortal o incidente peligroso, al no haberse realizado la notificación correspondiente ante la autoridad administrativa de trabajo dentro del plazo de 24 horas después de sucedido el accidente mortal.
No cumplió con la entrega de equipos de protección requerido para sus actividades, ni realizó una supervisión efectiva de las labores de mantenimiento realizadas por el trabajador.
Finalmente, no cumplió con las obligaciones en materia de formación e información sobre seguridad y salud en el trabajo.
Por todas estas infracciones, Sunafil propuso una multa a la empresa de 95 mil 288 soles.
LOS HECHOS
Gonzalo Israel Flores Córdoba perdió la vida la tarde del 15 de enero último, cuando reparaba uno de los ascensores del Hospital Regional de Moquegua.
Acudió a cumplir con la tarea que Edel, empresa para la cual trabajaba, le había encargado. Se puso a revisar el cableado en el sótano.
De pronto, la cabina que estaba enganchada se descolgó y lo decapitó.
Su tío Alex Flores no se explica cómo la empresa lo envió solo a realizar un trabajo de alto riesgo. Exige que se investigue y se sancione a los responsables.