Durante el actual estado de emergencia por el coronavirus, don Silverio Matamoros (80) se ha convertido como uno de los más reconocidos proveedores de trucha en el distrito de Acoria, en la región Huancavelica. Esta actividad la realiza junto a su esposa Juana (79) quienes entregan este producto cumpliendo con todos los protocolos de bioseguridad para evitar el COVID-19.
Así lo confirmó el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis) que aseguró que el adulto mayor soñaba con tener una pequeña piscigranja la cual logró construir pero debido al Fenómeno El Niño de 1997 lo perdió todo; sin embargo, tres años después y con 60 años de edad reemprendió este proyecto.
Actualmente, ambos alimentan y cuidan con mucha dedicación a las truchas en el anexo de Quishuar. Al lograr que estos peces tengan el peso ideal lo ofrecen a los pobladores por su alta calidad nutritiva y a precios accesibles en el mercado y la feria del distrito de Acoria.
Junto a su esposa han emprendido esta actividad para solventar sus gastos.
Para que estos adultos mayores refuercen sus conocimientos reciben el apoyo de Saberes Productivos del programa Pensión 65 del Midis.
Respecto a su salud, tanto don Silverio como su esposa son usuarios de Pensión 65, lo cual les permite acceder a servicios de salud del Sistema Integral de Salud (SIS).
Siempre quiso tener su piscigranja y luego de varios años lo pudo conseguir.
“Al inicio no fue nada sencillo; siempre fracasaba en este proceso. Por ejemplo, en 1997 el aumento del caudal del río Ichu perjudicó las pozas donde criaba a las truchas. Decidí dejar dicha actividad para trabajar en la mina”, manifestó.
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