El cierre de carreteras y la suspensión del servicio de buses interprovinciales, como medida preventiva para evitar la propagación de coronavirus, ha ocasionado que cientos de personas busquen otras formas de regresar a sus lugares de origen. Para ello, iniciaron largas caminatas por zonas aledañas a la Carretera Central.
Sin embargo, esa situación alarmó a la población cercana. Familias del anexo de Corcona y del distrito de Santa Cruz de Cocachacra, en la provincia limeña de Huarochirí, expresaron su preocupación por la gran cantidad de adultos y menores de edad que transitan de Lima con dirección a las regiones de Junín, Huánuco y Huancavelica.
Ante ello, las autoridades procedieron a intervenir a 500 personas, quienes fueron retenidas en la garita de control policial de Corcona. En tanto, los moradores solicitaron la intervención inmediata de las autoridades, ya que temen contagiarse de la enfermedad.
El alcalde de Santa Cruz de Cocachacra, Neptalí Carrasco Torres, coordinó con las autoridades de la red de salud para realizar una desinfección inicial a este grupo de personas, que permaneció en la losa deportiva de Corcona, y ver la posibilidad de que continúen con su desplazamiento.
“Hemos coordinado con algunos señores y se les dice por qué no se quedan en Lima. El Gobierno ha dicho quédese en su casa, pero señalan que vinieron a la ciudad a buscar trabajo y nos encontramos con esta pandemia; ya no tenemos qué comer y nos tenemos que trasladar a nuestros pueblos”, declaró Carrasco Torres.
Agentes de la Policía Nacional han cercado la zona para evitar que estos peruanos —muchos sin mascarillas— continúen su camino, mientras se encuentra una solución.