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Con ayuda de soldados y la policía nacional, la Municipalidad Provincial de Cañete clausuró por 10 días el mercadillo municipal de esta localidad ante los recientes resultados que arrojó la Red de Salud en la última prueba COVID-19 tomada a 130 comerciantes del centro de abasto.
La medida se dio el último miércoles, ya que 49 comerciantes dieron positivo a la prueba rápida, y en prevención a más contagios, la comuna local decidió clausurar el mercado por representar un foco de contagio en la zona.
Esta medida tomó por sorpresa a los comerciantes que desarrollaban sus actividades de manera normal, en algunos casos guardando los protocolos de seguridad, obligándolos a cerrar sus puestos e invitando al público a retirarse del referido local.
La zona se vio previamente acordonada de militares quienes se encargaron de hacer cumplir la orden de desalojo. En lo que va de la pandemia, los hospitales de Cañete presentan graves problemas debido a la falta de oxígeno, respiradores e infraestructura hospitalaria.
