Aunque al inicio negó todo, finalmente las pruebas delataron a Carlos Javier Hualpa Vacas, quien planificó quemar viva a Eyvi Ágreda mientras la joven cajamarquina de 22 años viajaba en un bus de transporte público en Miraflores. La joven se debate entre la vida y la muerte, mientras que su agresor pasará 9 meses de prisión preventiva por un delito que se pide aplicar la pena máxima.
La prueba principal que habría puesto contra la pared a Carlos Javier Hualpa Vacas es el resultado del examen pericial de medicina forense que le realizaron por una lesión en su antebrazo izquierdo. Este concluyó que la quemadura de segundo grado se debe a un agente químico directo y no a un accidente que sufrió en su casa, como dijo al inicio del interrogatorio.
Carlos Javier Hualpa Vacas aseguró en un principio que se quemó el brazo con agua caliente cuando recibió una llamada telefónica en la que le avisaron que Eyvi Ágreda había sido quemada viva en un bus en Miraflores. Sin embargo, más tarde se comprobó que la herida fue causada por gasolina.
Otro dato relevante sobre el terrible caso de Eyvi Ágreda es que a las 8:55 de la noche del último miércoles 24 de abril, una hora y media después del brutal ataque en Miraflores, Carlos Javier Hualpa Vacas estaba siendo atendido en un hospital de Comas por una quemadura en el brazo.
Finalmente, hasta tres cámaras de seguridad del distrito de Miraflores captaron la huida de Carlos Javier Hualpa Vacas tras el ataque a Eyvi Ágreda. Allí se le ve cubierto con una casaca y capucha y corriendo en dirección opuesta al lugar del atentado.
Una vez con todas las pruebas en su contra, Carlos Javier Hualpa Vacas confesó su crimen. Según su abogado, se trata de una estrategia para obtener beneficios y así rebajar su pena hasta los 15 años de prisión.
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hasta tres camaras de segudirad lograron captar su huida corriendo en sentido contrario
ya puesto en jaque hualpa confesó su delito