‘La vida me ha golpeado fuerte, pero sigo de pie’, así dijo Mercedes Quiñones García, una joven bodeguera que abrió su negocio hace casi tres años en Huaraz y no se dejó vencer por el temor que se vivía debido al coronavirus. Al perder su empleo, ella no se quedó de brazos cruzados; al contrario, buscó la manera de generar dinero para ayudar con los gastos en casa.
“Soy contadora de profesión y trabajé en el sector público y privado, pero la pandemia afectó laboralmente a muchos. Yo fui una de ellas, prácticamente abrí mi negocio para sobrevivir. Empecé haciendo delivery a mi propia familia, pero no quise quedarme en la informalidad e inscribí mi empresa Qollca+ (edificación donde se almacenaban cereales en el imperio incaico) para sacar los permisos. Oficialmente abrí las puertas de mi tienda en setiembre de 2020″, contó Mercedes, presidenta de la célula de Áncash de la Asociación de Mujeres Bodegueras del Perú (Agremub).
BARRERAS EN EL CAMINO
La comerciante contó que no fue ajena a los obstáculos. En ese tiempo hubo desabastecimiento de algunos productos en provincias y, lo peor, su mamá enfermó y tuvo que ser internada en 2021. “Fueron momentos duros y angustiantes, cerré la tienda para poner toda la atención en mi mamá, perdí mercadería y creo que hasta ahora no he podido recuperarme, pero sigo de pie, con más ganas de seguir trabajando y luchar por mis metas”, expresó.
Cuando estaba levantando el negocio vino el caos político y tuve que cerrar otra vez, pero solo por algunos días ante el temor a los saqueos, pues si no apoyaba el paro o no les daba productos entraban a la fuerza y se llevaban lo que querían. “La situación mejoró, pero llegaron los huaicos y con esto el desabastecimiento de productos en todo Áncash. Lamentablemente a provincias no llegan muchas empresas y tenemos que comprar a las distribuidoras, por eso no accedemos a bonos, promociones o cambio de la mercadería vencida”, agregó.
ASOCIACIÓN
Mercedes escuchó sobre una asociación de bodegueras, le pareció interesante y buscó información. Se inscribió y ahora es dirigente. Hace unos días llegó a Lima para promover, junto a sus compañeras, la campaña #ConPuncheBodeguero.
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