Las hermanas de José Arequipeño, Sebastián Zeballos y Andrés Fassardi, quienes son tres de los cinco acusados de violar de manera colectiva a una joven de 21 años el último fin de semana, en Surco, aseguraron que sus familiares son inocentes y pidieron que se respete el debido proceso.
En declaraciones a América Televisión, las tres mujeres, cuyas identidades permanecen en reserva, criticaron que se haya dictado prisión preventiva contra sus hermanos pese a que se ha demostrado arraigo.
“Entre las hermanas nos hemos juntado para defender la inocencia de estos cinco chicos porque creemos que no se ha llevado a cabo un proceso de investigación justo”, señaló una de ellas.
“No es justo que se les haya dado prisión preventiva cuando se han presentado todos los sustentos necesarios para demostrar arraigo tanto familiar como laboral como domiciliario. Consideramos que el proceso ha sido sumamente rápido”, agregó otra de ellas.
“Estamos hablando de una presunta violación. La violación no está confirmada hasta que lo determine un juez. Son presuntos violadores y yo creo que los cinco son inocentes”, puntualizó la tercera.
Incluso, en el extremo de la defesa a sus familiares, refirieron que la mujer denunciante podría estar “mintiendo” o “no recordar lo sucedido”.
“No sé si ella lo dijo de mentira o si ella simplemente no se acuerda. Nosotras somos mujeres y hemos pasado acoso sexual en la calle yo sé qué es pasar eso porque todas lo pasamos. Nosotras somos feministas, las tres hermanas somos feministas”, aseveró.
El Poder Judicial dictó la última semana nueve meses de prisión preventiva contra José Arequipeño, Sebastián Zevallos, Diego Arroyo, Andrés Fassardi y Manuel Vela por ser presuntos autores del delito de violación sexual contra una joven de 21 años en una casa ubicada en el distrito de Surco.
Según informó la policía, la víctima pasó por los exámenes médicos correspondientes y estos certificaron que la mujer había sufrido violencia sexual.
Respecto a estos hechos, los acusados habrían reconocido, de acuerdo a lo señalado por el coronel PNP Jhonny Rolando, jefe de la División Policial Sur, que mantuvieron relaciones con la joven denunciante, aunque dijeron que éstas “fueron consentidas”.