Debido a la pandemia por el COVID-19, el cual dispuso el confinamiento de la población pediátrica durante el año 2020; se incrementaron en un 70% las atenciones por quemaduras en niños entre 2 y 5 años, en el Servicio de Cirugía Plástica y Quemados del Hospital Nacional Guillermo Almenara de EsSalud.
Los accidentes más frecuentes se registraron entre marzo y junio del año pasado, y estos son por contacto directo con líquidos calientes (agua hervida, sopas y otros) por lo cual, el médico del nosocomio mencionado, Dr. Luis Felipe Huertas, recomendó a los padres de familia a estar muy vigilantes y no permitir que sus hijos permanezcan en la cocina.
“Dentro de la incidencia que se maneja en la Unidad de Quemados, las quemaduras por líquidos calientes se registraron en el orden del 60%, por contacto con fuego en 30%, con conexiones eléctricas o quemaduras químicas en 10%”, señaló, el especialista.
Según datos estadísticos del establecimiento de salud, generalmente este tipo de accidentes se incrementan entre los meses de diciembre a marzo, es decir, cuando los menores salen de vacaciones, sin embargo, el año pasado, este panorama cambió por el confinamiento que obligó a que los menores a permanecer en sus hogares durante el período escolar.
El especialista, recordó, que, la curiosidad e inocencia de los más pequeños hace que no midan el peligro y se acerquen a ollas, cacerolas y otros recipientes donde se colocan líquidos o se preparan alimentos. Asimismo, introducen sus dedos en los enchufes porque quieren indagar que hay dentro o manipulan las llaves de los balones de gas.
“Si tu hijo sufrió una quemadura, lo primero que debes hacer es mantener la calma, identificar la zona afectada. Posteriormente lo que va a marcar la pauta en la evolución de la quemadura es el método de enfriamiento que se debe realizar con agua por aproximadamente 30 minutos”, finalizó.