En lo que va del mes de julio casi todos los distritos de Lima Metropolitana han presentado días sin fallecidos por COVID-19, según informó el ingeniero y analista de datos, Rodrigo Parra, en base al registro del Ministerio de Salud. “La excepción, por el momento, es el Cercado de Lima, donde se han registrado 72 fallecidos”, anotó Parra.
Así, hasta el 19 de julio los distritos con menor cantidad de decesos son Ancón (4), Barranco (5), Chaclacayo (3), Cieneguilla (1), La Molina (6), Lurín (2), Magdalena del Mar (5), Pachacámac (5), Pucusana (1), Miraflores (7), Pueblo Libre (5), San Bartolo (1), San Borja (6), San Isidro (3) y San Luis (4).
Mientras que en otros distritos la cifra de fallecidos sigue siendo elevada, como el Cercado de Lima con 72 fallecidos, San Juan de Lurigancho (34), San Martín de Porres (45), Ate (40) y Comas (34). El total de fallecidos en los distritos de Lima Metropolitana suman 578.
Parra explicó a este Diario que estos últimos son distritos donde la población por metro cuadrado es mayor a diferencia de otros, y donde también se registraron picos elevados de fallecidos durante la primera y segunda ola.
“En promedio son 23 muertes diarias que aún se registran (en comparación) del pico de más de 350 que se presentó en marzo”, señaló Parra.
Las causas
Sobre las causas de que se presenten días sin fallecidos, Parra consideró que obedece en parte a la vacunación contra el coronavirus, pero también por el descenso de la segunda ola, que se registra desde el mes de abril.
Indicó que esta disminución ya se venía registrando, por ejemplo, en la población que recién se esta vacunando de 40 años hacia abajo.
Agregó que también se ha acentuado esta caída en los grupos etarios de 40 años a más, gracias al proceso de inmunización.
La excepción es Lima cercado donde en ningún día de julio se dejó de reportar muertes, sumando 72 hasta el 19 de julio.
También en regiones
Sobre la situación en regiones Parra comentó que la mayoría también esta empezando a presentar días sin fallecidos en este mes de julio, algunos más que otros, como Madre de Dios, Pasco, Tumbes.
Las excepciones son Áncash, Arequipa, Cajamarca, Cusco, Ica, Junín, La Libertad, Lambayeque, Lima, Loreto, Puno y Tacna.
“Pero digamos que este cuadro se va pintando de verde (ver gráfico), a medida que van pasando las semanas de descenso generalizado y también va avanzando la vacunación”, señaló.
Tercera ola tendría menos impacto
Respecto a la eventualidad de una tercera ola de coronavirus en el Perú, Parra señaló que todavía no hay un solo indicador relacionado al COVID-19 que este en aumento, en relación a casos positivos, hospitalizaciones, UCI, fallecidos.
“A nivel nacional estamos llegando a valores mínimos, casi por debajo de los que tuvimos después del descenso de la primera ola, incluso muchas regiones han bajado de este mínimo nivel que tuvimos en noviembre y están en los niveles de marzo y abril de 2020 cuando iniciaba la pandemia”, mencionó.
Por estas razones, consideró que si ocurriese una tercera ola, que es altamente probable, como ha sucedido en otros países, habrá una diferencia respecto a la segunda ola.
“La población vacunada que es partir de los 40 años, ha representando casi el 75% de las muertes totales por COVID-19 desde el inicio de la pandemia, entonces en el marco teórico de la vacuna sería 75% de muertes de primera y segunda ola que dejarían de ocurrir por efecto directo (de la vacuna)”, analizó.
Por lo tanto, señaló que en una eventual tercera ola se verán nuevos casos, teniendo en cuenta la presencia de variantes de COVID-19 con mayor capacidad de transmisión como la Delta. Otra diferencia, indicó, es que ahora tenemos cinco veces más camas UCI, en comparación con la primera ola.
“La respuesta que se va a tener ante una tercera ola va a ser mucho más rápida”, subrayó.