En la Cumbre Mundial por la Biodiversidad que se inició este 21 de octubre en Cali - Colombia, Perú mostró la importancia de la herramienta MERESE (Mecanismo de Retribución por Servicios Ecosistémicos) y su aplicación en un modelo innovador para la conservación y gestión sostenible de los recursos hídricos y la biodiversidad.
Mediante un modelo de alianza entre Sedapar, Sernanp, la ONG Descosur (administradora de la reserva), y Profonanpe, más la participación de actores públicos y privados, el MERESE, en Arequipa, permitió la construcción de 19 qochas, canales rústicos y zanjas de infiltración, recuperando bofedales y fortaleciendo las capacidades de las comunidades en técnicas de conservación en la Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca, ejecutados en tiempo récord.
Del 21 de octubre al 1 de noviembre, la ciudad de Cali, Colombia, es sede de la Conferencia de las Partes (COP 16) del Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB), que está reuniendo a líderes mundiales de más de 190 países, entre jefes de Estado, autoridades y expertos, para tomar decisiones concretas que determinarán el futuro de nuestro planeta. La pérdida acelerada de especies y recursos naturales nos obliga a actuar con el objetivo de detener y revertir la pérdida de biodiversidad para el año 2030.
En este contexto, la participación de Perú es una de las más destacadas, con la presentación de la exitosa herramienta MERESE (Mecanismo de Retribución por Servicios Ecosistémicos), para movilizar inversiones en ecosistemas de interés hídrico, a partir de aportes de todos los usuarios de agua en sus recibos mensuales, que son recaudados por las empresas prestadoras de servicios de saneamiento de Perú.
Con el apoyo técnico y colaboración del proyecto “Infraestructura Natural para la Seguridad Hídrica- NIWS”, un esfuerzo conjunto de USAID, el Gobierno de Canadá y Forest Trends, esta innovadora herramienta está siendo efectiva en la implementación de proyectos ecosistémicos para la conservación, restauración y gestión sostenible de los ecosistemas hídricos en la región Arequipa y otras regiones. En el Perú, 32 EPS ya han empezado a ejecutar sus MERESE y ya se han recaudado más de 132 millones de soles para proyectos de recuperación de las fuentes naturales de agua y los ecosistemas.
La Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca (RNSAB), una de las 77 Áreas Naturales Protegidas del Perú, es una de las principales beneficiarias de la herramienta y actualmente provee de agua al 90% de la población en dicha región.
Consciente de la importancia de la RNSAB como principal fuente hídrica de la región, NIWS ha impulsado un modelo para acelerar las inversiones en infraestructura natural basado en un acuerdo suscrito entre la empresa Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Arequipa - SEDAPAR, el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas (SERNANP) y el Fondo de Promoción de las Áreas Naturales Protegidas del Perú (PROFONANPE).
Este modelo permite que los aportes de los usuarios que son recaudados por SEDAPAR, sean canalizados a través de PROFONANPE para realizar intervenciones supervisadas y coordinadas por SERNANP y ejecutadas por la ONG DESCOSUR, administradora de la RNSAB.
DESCOSUR tiene un contrato de administración de la reserva con SERNANP por 25 años. Gracias al Plan de Intervenciones del MERESE, se han logrado significativos progresos en la restauración de ecosistemas, la biodiversidad y el fortalecimiento de las comunidades locales.
El éxito del MERESE en la cuenca Quilca-Chili de Arequipa es un ejemplo de buena gobernanza y colaboración entre actores públicos y privados. Este modelo no solo protege recursos hídricos esenciales, sino que también sienta las bases para un futuro donde la biodiversidad y el desarrollo económico vayan de la mano, con potencial para replicarse en otras regiones de Perú y América del Sur.
Desde octubre de 2021 SEDAPAR comenzó a recaudar recursos MERESE para financiar proyectos de conservación y restauración de la RNSAB, ejecutando entre el año 2022 y 2023 aproximadamente USD 454 mil en diversas acciones, tales como:
Construcción de infraestructura: Se han construido 19 qochas, 38 km de canales rústicos y 13 km de zanjas de infiltración para mejorar la captación y almacenamiento de agua.
Restauración de ecosistemas: Se han recuperado 243.9 hectáreas en cuatro bofedales, mediante medidas como la implementación de cercos excluidores de ganado y la instalación de cercos para proteger áreas sensibles.
Fortalecimiento de comunidades: A través de capacitación y talleres, 537 personas (311 mujeres y 226 varones) han fortalecido sus capacidades en técnicas de conservación y gestión sostenible de los recursos naturales. Un total de 272 familias han participado activamente en estas iniciativas.
En abril de 2024, un nuevo acuerdo extendió la alianza por 3 años más y comprometió US$ 1.5 millones para seguir ejecutando acciones hasta 2026 con el fin de proteger, conservar y restaurar los servicios ecosistémicos hídricos que brinda la Cuenca del Río Quilca Chili, comprendida en la RNSAB y su zona de amortiguamiento.
“SEDAPAR tiene 400,000 conexiones de agua en la región y destina el 1.2% de su facturación al MERESE. Gracias a nuestra alianza con la comunidad altoandina, garantizamos calidad y cantidad de agua para Arequipa. Sin su apoyo, nuestra sostenibilidad no sería posible. Este modelo ya se replica en otras EPS, y hemos firmado un nuevo convenio con SERNANP y PROFONANPE”, manifestó Liudmila Murillo, jefa del Departamento de Proyectos Especiales de SEDAPAR.
USD 372 millones de inversión en infraestructura natural en Perú
NIWS ha impulsado la conservación de los ecosistemas en Perú desde el 2018 hasta la actualidad, promoviendo el desarrollo de un Portafolio de inversiones valorado en USD 372 millones en proyectos de IN para la seguridad hídrica.
Al respecto, Fernando León, director adjunto NIWS, anunció que por primera vez en el Perú se van a financiar USD 210 millones en Infraestructura Natural en 11 cuencas hidrográficas, a fin de estar mejor preparados para enfrentar el Cambio Climático.
“Desde NIWS impulsamos varios mecanismos de financiamiento para la conservación y recuperación de la Infraestructura Natural, como por ejemplo el financiamiento por inversión pública de gobiernos regionales y locales, el financiamiento mediante el fondo MERESE de las EPS, y con el mecanismo de acuerdo gobierno a gobierno (ANIN-UK) para integrar la Infraestructura Natural en los proyectos de soluciones integrales para enfrentar fenómenos extremos por el cambio climático”, explicó.
Remarcó que también se impulsa el MERESE en Arequipa, creando un modelo que involucra a múltiples actores en la conservación y restauración de ecosistemas, logrando resiliencia climática y seguridad hídrica.
“En Arequipa ahora se están combinando mecanismos, ya que la naturaleza nos llama a trabajar en conjunto. Con esto, la población mejora su calidad de vida y en el centro están las comunidades que son parte de la solución”, añadió.
Cabe señalar que NIWS, un esfuerzo conjunto de USAID, el Gobierno de Canadá y Forest Trends, junto a sus socios Condesan, SPDA y el Imperial College de Londres fortaleció las capacidades de instituciones como SEDAPAR, SEDAPAÑ, EPS Moyobamba y Sedacusco para desarrollar proyectos de infraestructura natural, logrando reducir el tiempo necesario para desarrollar estas iniciativas.
La meta es consolidar a Perú como un referente en la región en cuanto a la gestión sostenible de los recursos hídricos y la conservación de la biodiversidad.