“No estoy para que ustedes me digan, ni yo para decírselo… pero aquí llegó su Cantinflas peruano, el más cuate de todos sus cuates”. Con esta copla saluda al público don Antonio Carrera Díaz (78), el imitador de Mario Moreno ‘Cantinflas’ más longevo del país y vecino de Ventanilla. Todos aplauden, algunos hasta se acercan a tomarse fotos o grabar ‘videítos’. Carrera se sonroja, sus ojos se ponen llorosos, mira al cielo y agradece a su ídolo mexicano.
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Antonio, ¿desde cuándo imita a ‘Cantinflas’?
Desde que tenía 20 años, aproximadamente. De jovencito trabajaba como barrendero en las calles del Callao, pero también me iba a barrer a los cines. Y en una de esas vi la película ‘El bombero atómico’ y quedé maravillado con Mario Moreno.
Ahí se enamoró del mexicano…
Exactamente. Mis amigos decían que me salía igualito y hasta nos parecíamos físicamente, ja, ja, ja. Eso me motivó a seguir imitándolo. Y mírenme, aquí estoy casi 60 años después. Gracias a Dios, todavía tengo energía para seguir siendo ‘Cantinflas’, que en paz descanse y de la gloria goce.
Agradecimientos: Pollería El Gorrión, en Ventanilla. Foto: Allengino Quintana.
¿Cuánto tiempo le demoró aprender las coplas y trabalenguas?
Un par de meses, seguramente, no recuerdo muy bien. Pero sigo aprendiendo. Y me sale igualito, parece que el propio Mario Moreno me hubiera enseñado, ja, ja, ja. Sé sus gestos a la perfección y los trabalenguas de sus más de 50 películas.
¿Alguna vez se le cruzó la idea de ser actor como su ídolo?
No creo, aunque siempre tuve la chispa y el entusiasmo para congeniar con el público. Me dura hasta hoy, sitio a donde voy, sitio donde llueven los aplausos. Estoy muy agradecido por eso. Soy el engreído de pollerías de aquí, de la avenida Gambetta, sobre todo de ‘El Gorrión’, que me han acogido como si fuera mi familia.
Y también es el engreído de los semáforos…
Así es, aunque ahora he bajado el ritmo porque los años pesan… pero los micros y mototaxis me tienen paciencia. Aprovecho cada luz roja y yo mismo soy. Siempre caen unas moneditas.
Es conocido en la avenida Gambetta en el Callao. Foto: Allengino Quintana.
Mantiene la jovialidad de un quinceañero…
Es que aprendí a cuidar mi salud, porque si yo no lo hago, nadie lo hará. Tengo familia, pero estoy solo. Dejé de tomar tequila hace mucho porque quiero vivir más años.
¿Qué otros escenarios ha pisado?
En mis buenos años mozos he trabajado en peñas criollas, restaurantes turísticos, verbenas, parques muy grandes, fiestas de aniversario. Siempre he cosechado aplausos del público, mis cuates.
Agradecimientos: Asociación de voluntarios 'Somos más cada día'. Foto: Allengino Quintana.
‘Cantinflas’ era bien coqueto, ¿usted también?
Como quien no quiere la cosa, pero sí, ja, ja, ja. Una vez vi a una gringuita muy guapa caminando y le dije ‘Adiós, gringuita artificial’, ella volteó y me dijo ‘Adiós, idiota natural’, ja, ja, ja. Siempre con respeto como Mario Moreno.
¿Qué le diría al artista si lo tuviera al frente?
Gracias por cambiarme la vida.
Agradecimientos: Voluntariado ‘Somos cada día más’
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